Empeño fallido de Alejandro Talavante en la monumental de Madrid
En la tarde de este domingo de Resurección el diestro extremeño se anunció como único espada para enfrentarse a seis toros del hierro gaditano de Núñez del Cuvillo. Toros flojos de remos y justos de casta, que agregado a la falta de repertorio del diestro propició un resultado deficiente del festejo. A ello hay que sumar la climatología despacible con viento frío. Con esto queda expresado el deficiente resultado de la corrida que terminó con pitos y lluvia de almohadillas al ruedo. Entendemos que para una hazaña de matar seis toros en la primera plaza del mundo hay que estar en posesión de muchos dones toreros pues de lo contrario todo queda en un esfuerzo nulo. La plaza registró tres cuartos de entrada.Crónica de José Julio García – Fotogalería
Las Ventas, domingo 12 de abril