El tiempo no acompañaba mucho en la tarde de ayer, un viento fuerte soplaba antes de comenzar el festejo, que se fue aplacando para posteriormente aparecer en los aledaños de la plaza un tornado de arena. Ahí no quedaron las inclemencias meteorológicas que marcaron la tarde, tras el tornado, una tormenta en condiciones con truenos y relámpagos que trajeron consigo la lluvia, en algunos momentos torrencial. Aún así los toreros salieron con ganas, aunque no todos con las mismas condiciones y ganas. Destacó la garra y la enjundia de Curro Díaz que le tocó torear bajo la lluvia en sus dos astados. Esa lluvia que inspiró una faena cargada de arte, no todos los presentes la disfrutaron, ya que en el último de la tarde pocos aguantaron en el tendido, y abandonaron la plaza. Crónica y fotografías de Raquel Montero – Fotogalería
Villarubia de los Ojos, 12 de septiembre 2009