Savalli se opone a la climatología y a la corrida de Cebada Gago en Istres. Espeluznante cogida de Barrera
Después de dos festejos de lujo, la feria de Istres dio un giro radical. Y llegó la guerra al ruedo en esta tarde de cierre. Pero, no fueron los toros los causantes principales de los disgustos con los que tuvo que pechar la terna, sino una vez más las ráfagas de Mistral que descubrían a los toreros frente a un ganado que no dejaba margen al error o a la aproximación. El encierro de Cebada Gago han cumplido con la fama de la casa, pero a buen seguro hubiesen resultado mucho más manejables sin este dichoso viento. Complicados en conjunto, no destacaron especialmente en varas sumando doce encuentros con los montados, y llegando al último tercio con un peligro sordo que sólo exigía que se le hicieran las cosas bien, lo que el aire hizo más difícil. El último de la corrida, que acusó flojedad de remos, apretó con lo srinñones en varas y se vino arriba en la muleta, brindando a medhi Savalli un triunfo inesperado visto las condiciones climáticas. (…)
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Istres, 20 de junio 2010
