Parladé lleva a pique la primera de San Miguel
Menudo fraude el que hemos vuelto a sentir en las carnes los aficionados que llenábamos esta tarde la Maestranza a pesar de la previsión de lluvia y de la caída del cartel de el Cid. Juan Pedro Domecq nos ha vuelto a romper una tarde cargada de ilusiones que han dado al traste y que se ha convertido así, en una tarde terriblemente aburrida con un público santo. La falta de casta y fuerza chorreaba sangre, los toros flojos, sin fijeza, e incluso algunos, sin nobleza. Crónica de Conchita Rodríguez Ortiz