Con un tarde muy soleada, se celebró la última novillada sin picadores del ciclo de festejos taurinos de la capital de la república, en el marco del Festival de Verano número 13.

Nuevamente lideraron el paseíllo seis novilleros de las ciudades más taurinas del país (Bogotá, Cali, Medellín y Manizales)

Guillermo Valencia, la sensación del fin de semana pasado, nuevamente se fue siendo el triunfador de la tarde; corté el único apéndice de  la tarde a un novillo con bastantes complicaciones. No fue una  faena  artística  a totalidad pero sí muy técnica, logrando ahormar en ciertos instantes la embestida del novillo.

Como director de lidia, ejerció el novillero, David Martínez. Estuvo decoroso en su presentación y gustó dentro de la afición que llenó La Santamaría. No hubo orejas pero si reconocimiento del respetable.

Como segundo alternante se encontraba el caleño Guillermo Ceballos, quien desafortunadamente pasó sin pena ni gloria en el coso bogotano. Contó con uno de los mejores novillos de la tarde y sin embargo no hubo continuidad en su faena. No logró conectar… el mismo caso de hace ocho días en su presentación en La Santamaría.

Luis Miguel Castrillon desde su salida al ruedo, creó gran expectación dentro de los asistentes. Ayer vimos otra faceta del paisa, aunque siempre conserva su elegancia, fueron armas técnicas efectivas, las que utilizó a la hora de enfrentarse a un astado con mansedumbre y peligro. A Bogotá le  gustó Castrillon.

Repetía en Bogotá, el manizaleño Juan Diego Giraldo. Un joven con mucho entusiasmo y emoción en el ruedo, pero que se deja llevar por la alegría o nerviosismo y no logra conservar la calma y elegancia, en frente de la cara del toro. Lidió a un novillo con buenas condiciones, además de ser el más fuerte de la corrida; a pesar de las aptitudes del ejemplar Giraldo no logró entenderlo y se fue con división de opiniones tras no poder pasaportar al novillo.

Cerró la tarde el rejoneador Andrés Ruíz, de la ciudad de Bogotá. Cuenta con buena colocación de rejones y banderillas, pero carece de buena ejecución; comprometió todas sus jacas toreras ante los pitones del novillo. Recordemos que torear no es una persecución, sino una combinación de temple y mando.

Doña María Francisca Gutiérrez, presentó una novillada que cumplió en presentación y tuvo un balance de tres novillos que funcionaron de seis. Destacaron los lidiados en 2, 5 y 6 lugar.

 

 

Desde Colombia, Informa Carolina Baquero (Directora para América)