Informa desde Venezuela. Rubén Darío Villafraz. Periodista Taurino
El último capítulo de la edición de este año de la FISS no escapo de la polémica, pues otro de los toreros anunciados, como fue el mexicano Juan Pablo Sánchez, no hizo acto de presencia, por presentar retraso en su vuelo de México a Cúcuta. Al final le sustituiría el espada venezolano Erick Cortés, dejando un cartel netamente nacional, con los coletas tachirenses “Maravilla” y Castañeda, en la lidia de un encierro de Campolargo, donde ha destacado por su nobleza y recorrido un bravo astado, el cual sería premiado con el reconocimiento del indulto.
Tarde de contradicciones, pues no se sabía el cartel final, y a la postre el torero sustituto se llevaría la gloria del triunfo, en este caso el veterano coleta maracayero Erick Cortés, quien supo descifrar las nobles condiciones en la almibarada embestida de «Don Fabio», animal agradecido con la pulcra lidia que propicio el achocolatado coleta. Sublimes tandas de muletazos por ambas manos jaleadas con las ovaciones de los presentes, lo que despertó la petición unánime del indulto que no dudo el palco presidencial en conceder tras el largo trasteo. Previamente con el que abrió plaza Cortés dispuso de pocas opciones ante el parado mulo que pechó en suerte.
Fabio Castañeda cortaría una oreja de su primero del lote, frente a un astado de irregular desempeño con los engaños, siempre con la cara por las nubes, sin entrega, a las que no del todo se confió el menudo diestro, quien se le veía dubitativo en largo pasajes. La estocada entera tendidita, valió para que se le premiara con el mencionado y barato trofeo, que sacaron desde el desolladero. El que cerró plaza igualmente dejo en evidencia el poco rodaje del señalado espada, a quien nunca tuvo planteamiento concreto de labor. Fue silenciado.
“Maravilla” no ha tenido opciones de lucimiento con sus dos astados que despachó, sacando raza y mucha entrega, ante el escaso lucimiento que ofrecían dichos astados. Le echó ganas, pero su fallo con los aceros hizo que se le silenciara tras aviso en su primero, y nuevamente silencio tras dos avisos en el quinto.
Finalizaba así una feria que ha dejado y dejara mucho que hablar. Se ha puesto en evidencia la grave crisis que vive el toreo venezolano en los actuales momentos.