Se dio esta tarde la tradicional corrida de Navidad en la Plaza de Toros Santa María, donde había un gran ambiente.


Le faltó muy poquito para que se llenara, y con un clima muy apacible se lidiaron 6 toros de MOTECRISTO muy bien presentados y que se dejaron meter mano los corridos en segundo y quinto lugares, el resto han presentado complicaciones. 


Se lidió un toro de CARRANCO para rejones que dio buen juego 

JORGE HERNÁNDEZ GÁRATE ha tenido una actuación muy lucida en rejones, banderillas largas y cortas, destacando tres de ellas al violín. Se le fue el triunfo al fallar tres veces con la hoja de peral. Fue ovacionado.

 

ALEJANDRO TALAVANTE no ha contado con materia prima en su lote. Dos toros que desarrollaron dificultades. Su primero salía muy suelto y era violento. Su segundo no dijo mucho. Los mató de media y dos descabellos a su primero, y a su segundo; pinchazo, media y dos descabellos. Fue silenciada su labor.


Regaló un séptimo de CELIA BARBABOSA al que le hizo la faena de gran temple y variedad. Tenía ganadas las orejas, pero lo pinchó en repetidas ocasiones hasta escuchar un aviso y lo que hubiera sido un triunfo, se quedó arruinado por la espada.

OCTAVIO GARCIA «EL PAYO» ha vuelto a la senda del triunfo en su tierra.


Hemos visto a un torero que día con día crece y convence.


Ha cortado una oreja a cada toro por dos faenas plenas de torerismo y entrega.


En su primero dejo escapar la segunda oreja porque usó el descabello en dos ocasiones, luego de una faena enterada y de clase. A su segundo le hizo un trasteo con mayor profundidad y hondura, a un toro que tuvo más clase. Estocada fulminante.

DIEGO SILVETI está que no cree en nadie, hoy ha vuelto a la plaza de sus triunfos a ratificar que está en un gran momento y a demostrar que es un torero de mucho carisma y que transmite su toreo a raudales.


En su primero estuvo a punto de ser seriamente cogido al tropezar en el tercio cuando lo recibía de capa. Con una gran habilidad se hizo un quite el mismo pegando una larga afarolada de rodillas.
Le hizo una gran faena llena de entrega y sentimiento a un toro bravo pero no fácil.

 

Lo cuajó con la mano derecha en tandas largas y bien rematadas.


Cuando quiso torear por la izquierda, fue feamente prendido y se levantó para seguir toreando sin verse la ropa.


Terminó por escalofriantes Bernardinas y lo remató de un estoconazo impresionante en todo lo alto, que hizo rodar al toro sin puntilla.


Dos orejas le otorgó el juez por lo que fue fuertemente abroncado. La gente pedía el rabo y no lo quiso conceder.


Dio triunfal vuelta al ruedo.


En su segundo volvió a emocionar al público con capote y muleta, en una faena de mucha calidad e intensidad, a un toro que no tenía mucha transmisión. Lo mató de dos pinchazos y varios descabellos dejando ir los trofeos que tenía ganados.

 

Al final EL PAYO y DIEGO SILVETI dieron una vuelta al ruedo en hombros y salieron hasta las afueras de la plaza.