El diseño de estas singulares piezas dedicadas al mundo del toro, obras de la artista Eva González,  se realiza ajustando los motivos  sobre una base de vidrio previamente pulida  que posteriormente se   pasa al horno para su cocción mientras se prepara el fondo de la escena pintado con acuarela sobre cartón pluma. Terminado este proceso se enmarca en un cuadro de madera de pino teñido con tintes naturales.