La Unión de Criadores de Toros de Lidia, en su web, refiriéndose a la abundancia de ganaderías de su asociación en la Feria de San Isidro, hace alusión en concreto a los encastes a los que corresponden cada una de estas ganaderías:

«Predominan los encastes claramente de la línea Domecq Díez y Domecq Solís con 11 ganaderías, que lidiarán corridas de toros. Dos hierros se anuncian de la línea Lisardo Sánchez- Atanasio, otros dos de Saltillo. Además, astados de procedencia Baltasar Ibán, Santa Coloma o Gamero Cívico estarán presentes en el ciclo venteño».

El análisis por encastes, y por tanto de la raíz de la que procede el ganado que se utiliza en los espectáculos taurinos es muy acertado. Felicitamos a la Unión por este esfuerzo y a los medios que también lo hacen. Esta fórmula expresa la necesidad de conservar el ganado originario y diferenciarlo precisamente por las variables que presenta con respecto al resto.

Sugerimos que se precisen todas las denominaciones que tienen que ver con la ascendencia del ganado. Por ejemplo, si nos vamos a la procedencia, se debe mencionar el origen, es decir, la casta fundacional, encaste o línea dentro de éste, no pareciendo lógica la alusión al eslabón anterior de una ganadería actual, cuando sigue la ascendencia hacia una línea, encaste o casta fundacional.

Como ejemplo baste reseñar la contundencia con la que la ganadería Peñajara reivindica su origen, añadiendo desde inicios de este año 2009 a su denominativo como ganadería la expresión: «de Casta Jijona». Su representante manifiesta reiteradamente que el origen de su ganado es Jijón, según estudios genéticos de acreditada solvencia. Se debe entender que nada hay anterior a esta denominación porque es la raíz, es la casta fundacional. No debería, por tanto, hablarse del eslabón inmediatamente anterior (o ganadería anterior) como el de procedencia u origen si se conoce la Casta, encaste o línea como es el caso.

 

Vaya por delante nuestra satisfacción por la elección de ganado de Casta Jijona, aunque se quedan fuera otras importantes ganaderías que portan sangre jijona y que tienen tradición madrileña. Esperemos que den buen juego y se queden durante muchos años en esta feria.

 

 

 

 

Artículo de Lorenzo Cerón Miranda y Manuel Zamora Soria

Foto, toro de Peñajara, de Raúl Castro