Informa desde Venezuela. Giovanni Cegarra. Periodista Taurino

Negativo y lastimoso, aunque suene cruel decirlo y escribirlo pero es la cruda realidad, ha sido el Calendario Taurino Venezolano en este año 2017 que prácticamente termina con saldo de apenas doce corridas de toros, tres novilladas picadas celebradas en ciudades de la Región andina y llanera que en comparación con años anteriores, hemos venido de más a menos, producto de la coyuntura económica en la que está sumergido el país, que indudablemente afecta hasta sus cimientos a la Fiesta Brava.

En lo que va de año, en San Cristóbal (Estado Táchira), Mérida y Tovar (Estado Mérida), Valle de La Pascua (Estado Guárico) y Achaguas (Estado Apure), en sus Ferias Tradicionales Taurinas se celebraron corridas de toros y novilladas mientras que en Tejerías y Maracay (Estado Aragua) una Fiesta Campera y dos Festivales Taurinos, respectivamente, quedando por celebrarse un Festival Taurino en San Cristóbal (Estado Táchira) y una Fiesta Campera/Festival de Rejoneo en San Felipe (Estado Yaracuy).

De pensar y preguntar, ¿qué nos depara el futuro? en medio de esta grave crisis venezolana a la que se suma la ya intolerable diatriba política que tanto ha perjudicado el desarrollo socio económico político del país, arrastrando todo a su paso y por supuesto, se ha llevado de volandas a lo taurino.

La Fiesta Brava en Venezuela se mantiene, hoy por hoy, en tres ciudades andinas, en San Cristóbal con su Feria de San Sebastián en vías de rescate e impulso en el Estado Táchira; Mérida con su Carnaval Taurino de América, Feria del Sol y Tovar con su Feria Virgen de Regla, ambas en el Estado Mérida, en las que los Empresarios Taurinos se la juegan, el todo por el todo, en medio de la crisis, lidiando la carencia divisas para conformar carteles ajustados a la realidad económica del país, que debe entenderlo, sin exigir de a mucho, la afición taurina venezolana pues sencillamente, la masa no está para bollos ni hay carne para pasteles.

Así andamos y estamos y a propósito de que ahora contamos con nuevos Gobernadores, ojalá que en los Estados con Ferias Tradicionales Patronales, sean amantes de la Fiesta Brava, nos echen la mano, valoricen nuestras Plazas de Toros e impulsen la Fiesta, los gremios y aficionados taurinos en general, no bajen la guardia, porque de lo contrario, el futuro será más difícil de lo que está, hasta aquí nos habrá traído el río, Dios nos agarre confesados y olé.