En una fría tarde abrió el festejo el rejoneador Jorge Hernández, que en todo momento realizó una faena muy limpia y variada, al grado que parecía llevar cosido al toro de las grupas de sus jacas, clavó muy bien los rejones de castigo y estuvo mejor en el tercio de banderillas, aunque en este momento el toro se fue apagando. Fue entonces cuando se presentó el grupo de Forcados Mexicanos, quienes en hasta tres intentos no pudieron consumar su pega; posterior a ellos llegó el momento de la suerte suprema y después de dos intentos fallidos, Jorge hecho pies a tierra y con la espada corta terminó con la vida de su primer enemigo escuchando un aviso.

 

 

 

 

 

 

 

 

El segundo toro de su lote, de enorme calidad, dejó ver en sus embestidas que era el tipo de toro que todo rejoneador gusta de torear, clavó los rejones de castigo en todo lo alto y adornó al morito de excelente manera, el punto máximo de su faena fue cuando toreando de costado dio una vuelta al ruedo con el toro a su merced; ya con el ambiente al máximo apareció el grupo de Forcados Mazatlecos quienes en una muestra de valentía y coraje realizaron una pega fenomenal que hizo levantar de sus asientos al respetable, fue entonces cuando Jorge se dispuso a clavar el rejón de muerte, quedando este en un muy bien sitio haciendo rodar sin puntilla al toro para llevarse las dos orejas que paseó acompañado de uno de los Forcados de Mazatlán.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El torero de Jalisco Humberto Flores lució desde el momento en que se abrió de capa con el primero de su lote, realizando el toreo de clase y temple que caló hondo en los aficionados, ya en tercio mortal su enemigo era claro por el lado derecho y ligó tandas de hasta 6 naturales, pero poco a poco se le fue acabando el gas al toro. Mató de entera y se le otorgaron las dos orejas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En el sexto de la tarde siguió aseado con su lidia y mostró mucha disposición, el toro no era claro en sus embestidas, al grado que se quedaba corto y había que tragarle mucho terreno para provocar sus arrancadas. Logró algunos pases de gran calidad y finalizó su actuación con un espadazo caído el cual no fue impedimento para que el Juez de Plaza le otorgara indebidamente los dos apéndices.

 

 

 

 

 

 

 

Pablo Samperio sintió toda la tarde el apoyo incondicional del público ya que es el torero de la región, en el primero de su lote no encontró el acoplamiento y dejo ver que aun no cuenta con la experiencia para afrontar compromisos tan importantes, ya que en ningún momento planto las zapatillas sobre el ruedo, mato de fea manera y escucho 1 aviso.

 

En el segundo de su lote las cosas no cambiaron mucho y toreando a distancia pudo conseguir algunos muletazos del agrado del publico, mato de media estocada tendida y delantera, que de efectos retardados hizo que el toro se entregara al puntillero, hubo petición de oreja y nuevamente en un exceso de la autoridad se le concedieron los dos apéndices.

 

 

 

 

Julio Benítez “El Cordobés” fue el menos favorecido en el sorteo ya que su lote resultó el peor, el primero muy débil al que realizó labor de enfermero,  lo mató de estocada en todo lo alto para conseguir así cortarle una oreja: El segundo de su lote peleó con los caballos, pero ya en el tercio mortal no tragaba un solo pase, tardó en matar y escuchó “El Cordobés” hasta 2 avisos antes de la finalizar su actuación.

 

 

 

 

 

 

 

 “Michelito”, quien apenas hace dos semanas se había presentado en esta plaza con una actuación que nunca olvidarán los asistentes de aquella tarde, ya que indultó un eral, esta vez no tuvo enemigo a modo para dejar ver las buenas maneras de su toreo, y aunque apenas es un niño probablemente en su persona pueda surgir algún día una figura del toreo. Abrevió su actuación ya que no había muchas posibilidades de éxito y mató de muy buena manera para ganarse así la oreja, cerrando de esta manera el festejo.

 

 

El encierro fue justo de presencia pero se dejó meter mano, la afición de Pachuca podrá recordar esta tarde por la Excelente Monta de Jorge Hernández, el Valor de los Forcados Mazatlecos, la Entrega de Humberto Flores y la Disposición de Julio Benítez,  quienes mantuvieron en todo momento la atención de la gente que llenó apenas un cuarto de entrada en la Plaza.

 

 

 

 

 

 

 

Desde Pachuca, informa Moisés Segura

Fotos de Aarón Segura