Cristian Escribano se mostró firme y dispuesto en el novillo que abrió plaza, en una faena basada en la mano derecha, pitón por el que el novillo embistió mejor. Mató mal y su labor fue silenciada. En el segundo de su lote realizó una faena muy completa al mejor novillo de la tarde, comenzando de rodillas y aprovechando la buena condición del astado. Mató de pinchazo y estocada y cortó una oreja después de escuchar un aviso. Adrián de Torres realizó en su primero una faena inconstante a un novillo manso. Los mejores momentos llegaron por el pitón derecho, por donde el novillo embistió mejor. Escuchó silencios tras aviso. El segundo de su lote fue un novillo manso y complicado con el que fue imposible el lucimiento. Silveti causó una buena impresión en el tercero de la tarde. Comenzó con un quite ceñidísimo por gaoneras. Con la muleta logró meter a un novillo que se iba muy suelto al que dio dos buenas series por el lado derecho con empaque y excelente sentido del temple. Por el otro pitón, el novillo era más complicado e incluso le propinó una voltereta al intentar un pase cambiado por la espalda. Mató de pinchazo y media tendida y fue silenciado tras sonar un aviso. En el sexto, hizo un buen quite por chicuelinas. En la muleta el novillo resultó violento y complicado, pero pese a ello Silveti lo intentó con firmeza hasta que el animal se rajó por completo. El novillero mexicano hizo un esfuerzo y lo puso todo de su parte ante un novillo de mala condición. Mató de media y necesitó de un buen número de descabellos para acabar con su oponente, lo que le impidió obtener recompensa. (Toromedia)