El cartel en principio anunciado para este día festividad de San Juan nos prometió un mano a mano entre los novilleros triunfadores de la feria de San Isidro, Gómez del Pilar y Gonzalo Caballero, madrileños y salidos de la escuela Marcial Lalanda. La cogida en Sevilla de Gómez del Pilar rompía ya el cartel. Y se organizó otro con tres espadas: novillos de la ganadería de El Cotillo, encaste Domecq Diez «Jandilla» para Andrés Torres, Sergio Flores y Gonzalo Caballero.

 

El fuerte calor y el sol que afectaba a media plaza restó asistencia ocupándose menos de la mitad del aforo, cuando la combinación de toreros ofrecía interés.

 

Los novillos de origen «Jandilla» que tienen fama de buen embestir por su poca fuerza rompieron el buen son que se esperaba del festejo. Nobles, flojos, cortos de embestida, echando la cara arriba e imposibilitando la ligazón de los muletazos. Los toreros con voluntad y decisión insistieron en lograr algo positivo que desgraciadamente no fue posible. Insistieron largamente y aburrieron. Una vez más se hacía razonable el dicho antiguo para estas ocasiones: «faena de aliño y media que basta» y todos tan contentos, por no padecer esa pesadez de porfiar para nada. Lo mas sobresaliente del festejo fue el par de banderillas, cuadrando en la cara y clavando en lo alto, alzando los brazos a ley, sacando el par desde la cintura, en el sexto novillo, el rehiletero Jesús Carvajal «El Maqui», que fue muy ovacionado.

 

Andrés de Torres cumplió en su cometido escuchó un aviso y el fallo lo tuvo con la espada por no hacer la suerte según los cánones.

 

Sergio Flores alargó demasiado las faenas inútilmente escuchó un aviso antes de despachar al mansote que se lidió en quinto lugar, de una estocada perpendicular y dos descabellos.

 

Gonzalo Caballero recibido con expectación en recuerdo de la buena impresión que causó en su actuación isidril mantuvo el pulso con capote y muleta y brevedad con la espada, suerte en la que debe de aplicarse realizándola de acuerdo con el clasicismo.

 

A las diez menos veinte de la noche abandonamos el coso, más de dos horas y media de festejo. Mídanse por favor en la lidia, se lo agradecerá el vecindario.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

José Julio García

Decano de la Crítica Taurina

Periodista – Escritor

Escalera del Éxito 103