Informa desde Venezuela. Rubén Darío Villafraz. Periodista Taurino

El toreo en Venezuela se muestra a la par como está el país. Sin rumbo y a la deriva, es un espectáculo que adolece de dolientes, y los pocos que tiene se lucran y terminan dejándole a la orilla de la cuneta de sus intereses. Pero la regla tiene sus excepciones, como lo viene demostrando el veterano espada maracayero Erick Cortés, quien sigilosamente está en los despachos librando una batalla no fácil, pero sí muy meritoria.

El hecho es que la fiesta brava en Maracay y Valencia aún se encuentra bajo la inoportuna medida prohibicionista –como se estila en los momentos actuales por parte de lo que no gusta a las autoridades gubernamentales- que un tribunal agrario de la circunscripción maracayera cuyo juez, Carlos Gámez, utilizando subterfugios con escaso sustento jurídico no debatidos por los entes taurinos desde marzo del año pasado, ha logrado mantener la prohibición de la lidia de reses de casta realizándose para tal efecto el tercio de banderillas, varas y suerte suprema lo que implica las bases esenciales de la lidia.

La situación ha tomado ribetes de esperanza para el conglomerado taurino, pues dicho juez, Carlos Gámez, fue removido de sus funciones, y en las altas instancias del TSJ se encuentra la medida que deje sin efecto tal decisión que abarca así mismo al estado Carabobo en materia taurina.

Esperemos que en el curso de las próximas semanas se puedan obtener noticias satisfactorias que nos den la ilusión de ver abiertas dos ruedos de vital importancia para la temporada taurina nacional como es la Plaza de Toros de Maracay la Monumental de Valencia, esta última sumida en el total abandono por parte de autoridades estadales carabobeñas, el cual poco o nada han hecho por mantener lo que era referencia de majestuosidad y orgullo para el toreo nacional.

Se ventila por los corrillos taurinos que de salir “humo blanco” a favor del toreo en las capitales aragüeñas y valencianas, a mediados de abril o finales de este se estarían organizando par de festejos de relevante atractivo, así como la posibilidad en noviembre de organizar acto de importante peso como sería conmemorar los 25 años de alternativa de Erick Cortés.