Con la ayuda del clima en Manizales, se dio el segundo festejo del certamen Toros y Ciudad en medio de un aforo de tres cuartos. Se cortó una sola oreja por parte del rejoneador caldense.

Se lidiaron siete novillos de la ganadería de Bengala, propiedad de Doña María Francisca Gutiérrez, bien presentado y serio en estampa; de juego desigual, en general con complicaciones, se destacó el lidiado en cuarto lugar que le correspondió al rejoneador.

El antioqueño Santiago Sánchez quien estaba muy bien trajeado (noche y oro, rematado en cabos blancos), no tuvo suerte, tiene destellos de toreo elegante; pero la falta de experiencia al igual que en sus compañeros es muy evidente. En el primero de su lote recibió una fuerte voltereta que rasgó su traje y tras matar al toro lo envió a la enfermería. En su segundo se le vio con menos emoción que en el anterior y  la faena careció de limpieza.  Palmas y palmas tras aviso.

Andrés Valencia de la Escuela Taurina de Santiago de Cali,  se destacó por su buena conexión con el público; sus dos faenas se caracterizaron por iniciar con un alto nivel de emoción y buen desenvolvimiento ante el toro, pero a medida que avanzaba la lidia se fue descomponiendo y la faena perdía su horizonte. Sin embargo la afición lo respaldó con sus aplausos.

Un joven de quince años, Daniel Garzón “El Parce” de la ciudad de Bogotá, completaba la terna de a pie; tiene valor y ganas de ser toreo, algunos buenos detalles mostró con el capote. Esta era su segunda novillada y hace ocho días en Cali mató su primer novillo, sería prudente que antes de entrar a las plazas de primera tuviera más preparación para enfrentar compromisos tan grandes. Palmas tras tres avisos y palmas.

Por último se presentó un rejoneador del municipio de Chinchiná (Caldas), Juan Pablo Valencia, quien presenta varias fallas de colocación frente al ejemplar  y falta concentración en la lidia para hallar  la forma correcta para enfrentarse a los astados. Cortó una oreja tras fuerte petición de oreja, generada por la afición que logró conectar con el caballero en plaza ante sus banderillas de buena colocación.

 

Desde Colombia, Informa Carolina Baquero