Primer festejo de la temporada en el coso madrileño con menos de media entrada, se nota la crisis económica, pues no queremos pensar en crisis de afición.

 

El mexicano Sergio Flores embarcó muy bien en el engaño al primero, y con buenas hechuras, plantándose en la cara y adelantando la muleta, ligó series de pases sobre ambas manos, con buenas hechuras, la faena  muy torera, la remató de una estocada sin puntilla.

 

Hubo fuerte petición de oreja  y dio vuelta al ruedo. El cuarto con ramalazos de manso se dolió en banderillas al pincho, y cortó terreno por el izquierdo. Brindó al Doctor García Padrós, y comenzó la faena con pases doblando al novillo por ambos lados. Sacó con torería al novillo lo poco que tenía. Sonó un aviso y acabó de una certera estocada. Fue ovacionado.

 

Tulio Salguero, de Badajoz, realizó un quite de frente, por detrás, en el primero, dejando su buena intención de hacer cosas. El segundo cumplió en varas y llegó a la muleta con noble embestida, pero este joven torero, en la línea costumbrista del toreo del siglo XXI, cita a los novillos sin cruzarse, y, con el pico de la muleta. Pese a estos defectos ligó pases, aunque sin sentirse y sin gustarse. Alargó la faena demasiado y, tras dejar un pinchazo y una estocada, realizando la suerte con el brazo suelto, escuchó un aviso, y remató con el descabello. El quinto peleó en varas, echando la cara arriba y se mostró muy acosón en banderillas. Inició la faena por tres muletazos por la espalda que no tuvieron eco. Con la muleta en la izquierda llevaba al novillo bien toreado ganando en calidad. A la hora de matar, entrando con el brazo suelto, dejó una estocada que hizo innecesaria la puntilla y fue ovacionado.

 

 

El madrileño Fernando Adrián, que hacía su presentación, se dejó ver en un principio en un buen quite al segundo de la tarde. El tercero iba bien por el derecho y, se vencía por el pitón izquierdo, estas intenciones las dejó ver al recibirlo con el capote por verónicas. En varas, al principio, no se empleó, pero acabó derribando al picador y su cabalgadura. Realizó la faena con derechazos despegados y ligó otros  que remató con el ayudado de pecho. La faena fue a menos al caerse el novillo, y, después escarbar y echar la cara abajo, quedándose corto en la arrancada. La voluntariosa labor del torero la cerró de un pinchazo, avisó, una estocada ladeada, media, estocada y descabello. División de opiniones.

 

En el que cerró plaza lo recibió con unos faroles de rodillas, y continuó por verónicas se calidad. El novillo llegó a la muleta con la embestida corta pese a la voluntad del diestro no logró lucimiento, sonó un aviso, y acabó de una estocada.

 

A las dos horas y veinte minutos de haberse iniciado el festejo salíamos de la plaza.

 

Hasta el festejo del domingo de Ramos en que nos espera un mano a mano entre Iván Fandiño y David Mora.

 

 

 

 

 

José Julio García

Decano de la Crítica Taurina

Periodista – Escritor

Escalera del Éxito 103