Una vez finalizada la temporada, y después de resentirse de la lesión de hombro en Zaragoza, el torero salmantino ha decidido, previa consulta médica, que ésta era la mejor ocasión para someterse a una operación de este tipo. “Me permitirá estar en plena forma para la próxima temporada, ya que después de la rehabilitación, comenzaré a entrenar de salón y a salir al campo”, afirma el torero.

El parte médico, firmado por el  Dr. Lomo Garrote, reza lo siguiente: “El paciente presenta una inestabilidad anterior gleno-humeral con lesión ósea asociada. Es intervenido mediante cirugía artroscópica comprobándose reinserción labrum medio y Bankart óseo. Se realiza reanclaje con tres arpones reabsorbibles. Buena evolución postoperatoria”.

Domingo tendrá que tener el brazo inmovilizado durante tres semanas y luego comenzará la rehabilitación. El torero salmantino está ansioso por volver a torear, de hecho, ya cuenta las semanas en las que podrá volver a entrenar: “En total, serán cuatro o cinco semanas, y luego podré volver al campo”, asegura el torero.

La lesión se le reprodujo en Zaragoza, de ahí que tuviera problemas para matar su segundo toro en la última tarde de una temporada que ha sido muy positiva para el torero, con éxitos muy sonados como el indulto de un toro de Bañuelos en Medina de Pomar o el triunfo de Barcelona, donde también vivió la cara amarga de la cornada. La evolución del torero es muy buena, aunque habrá que esperar a mañana para que le den el alta médica.