Jerónimo que reapareció en el redondel del coso de la colonia Noche Buena, luego de tres temporadas y casi cuatro años. Inició su faena de capa recibiendo al primero de la tarde con exquisitas verónicas, finiquitando su labor con el percal con pintureras chicuelinas, que evocaron al desaparecido torero regiomontano Manolo Martínez, inició su labor con la bayeta  con la mano diestra, logrando pegarle una buena tanda de derechazos, consintiendo al astado logrando meterlo en su muleta, para pegarle un trincherazo y el de la firma, cambiándose la franela  a la mano izquierda  intentando probar la embestida del cornúpeta por ese lado, al que no acudió quedándose parado. Con la tizona pinchó una vez,  para luego dejar una estocada contraria y matar al primer intento de descabello, fue ovacionado  por el cónclave y saludo en el tercio.

Con su segundo de nombre “Sesenta años” número  45, Jerónimo estuvo inspirado con el percal  ejecutando preciosas verónicas, y elegantes lances por  tafalleras y navarras demostrando la gran diversidad de quites y lances que tiene la llamada escuela mexicana del toreo. Su faena con el trapo rojo fue a base de derechazos  de excelente confección, pasándose al cárdeno de aquí hasta allá, logrando sustraer un canoro  olé de las casi diez mil gargantas presentes en los tendidos de la México. Para  luego montar el estoque muy seguro de sí mismo tirándose a matar por el pitón derecho, dejando dormidos los gavilanes en el morillo del de Garfias, suerte que fue premiada con una oreja con la que el primer espada dio la vuelta al redondel del coso capitalino.

José Luis Angelino recibió a “Cumpleañero” número 41 entrepelado bragado meano, tocado del pitón derecho, con un farol de rodillas pegado a tablas muy cerca de la división de sol y sombra,  seguido por un par de lances a la verónica,  terminando su labor con la capa con una revolera, cubrió el tercio de banderillas espectacularmente poniendo los tres pares al quiebro, asomándose al balcón. Con la sarga  estuvo tenaz, tratando de fijar la embestida del toro por ambos pitacos, sin conseguirlo. Pinchó una vez y mató de tres cuartos de estocada trasera. Recibió aplausos y hubo escasa petición de oreja, los  restos del segundo de la tarde fueron pitados al ser trasladados al destazadero por el tiro de mulillas.

Al quinto de la tarde ya en pleno aguacero, Angelino lo fue a esperar en los medios recibiéndolo con una larga cambiada de rodillas,  y en valerosísima  actuación,  volvió a banderillear con el ruedo totalmente enfangado y al colocar el último par de aretes, el diestro tlaxcalteca, resbaló, y el bicho hizo por él dándole una voltereta en el aire y rasgándole  la taleguilla a la altura de la pantorrilla. Con la franela estuvo valiente exponiéndose a cada segundo sin lograr fijar la embestida del  garfeño. Con el metal no hubo precisión, pero el empapado público reconoció su esforzadísima actuación  y  el hambre de triunfo que hay en él.

Israel Téllez  con el primero de su lote  demostró ser un torero más serio, con el percal estuvo variado recibió a “E. Cavazos” herrado a fuego con el número 64, un negro listón bragado, con un farol de hinojos, para luego torearlo a la verónica, puso banderillas y fue ovacionado. Su labor con la pañosa fue de mucho decoro a base de prolongados derechazos  que  remato con forzados de pecho. Logrando arrancar entusiastas olés  de las cuerdas bucales del respetable. Ejecutó perfectamente la suerte suprema dejando más de media ración de acero en el morrillo de su enemigo que fue suficiente para que doblara, y a pesar  de que el respetable pidió la peluda, el Juez de Plaza Ricardo Balderas este no la concedió, y el  público  invitó  a Téllez a que saludara en el tercio.

Con el sexto de la tarde en plena tormenta,  el tercer espada sacó la clase, no dejándose  ganar las palmas de sus alternantes, enfrentándose a un mansurrón toro que desarrolló muy malas ideas, que fue a refugiarse a  su querencia natural  justo enfrente a la puerta de los sustos, hasta donde el diestro  lo siguió  y al intentar hacerlo pasar, el de Garfias  lo cogió, sufriendo una cornada grande que penetró la ingle  llegando hasta el abdomen , que lo dejó seriamente herido . Le colocaron un torniquete se tiró a matar y de inmediato fue llevado a la enfermería de la México, donde fue estabilizado  por el Doctor Rafael Vázquez Bayod,  y fue trasladado al Hospital Mocel  donde fue intervenido quirúrgicamente.

 

SOL Y SOMBRA

 

SOL

 

La magnífica actuación de los tres jóvenes toreros mexicanos Jerónimo, José Luis Angelino e Israel Téllez, que demostraron  que hay tela de donde cortar para fortalecer la baraja taurina mexicana y dar la pelea en la segunda mitad de la temporada a los toreros ibéricos que seguramente actuarán en esta plaza Monumental México.

 

SOMBRA

 

La soberbia actitud del octogenario  Juez de Plaza Ricardo Balderas al no conceder el apéndice a Téllez que se había ganado con su labor con la muleta y que la  cortó al ejecutar la suerte suprema dejando  una estocada en buen sitio para que el primero de su lote rodara sin puntilla.

 

Crónica y Fotografías de José Ricardo Gómez Cardona “Canta Claro”