Crónica de Ladislao Rodríguez Galán. Escalera del Éxito 260                                                      

Fotos: Ladis

El matador de toros ecijano Jaime Ostos (Escalera del Éxito 25) falleció el pasado sábado día 8 en Cartagena de indias a la edad de 90 años. Un infarto le sorprendió mientras dormía. El torero se había trasladado a esa localidad colombiana con su esposa Mª Ángeles Grajal (Escalera del Éxito 154) para recibir el año nuevo.

Jaime Ostos fue un torero fajador que nunca daba la pelea por perdida lo que le supuso serias y graves cornadas que a punto estuvieron de costarle la vida.

El 23 de mayo de 2019 el matrimonio estuvo por última vez en Córdoba. La presencia de esta pareja mediática despertó mucha expectación llenándose el Salón Liceo del Real Círculo de la Amistad  para escuchar a María Ángeles Grajal López en el pregón de la Feria Taurina 2019 que ese año alcanzaba la XXX edición. Jaime fue el presentador de su esposa siendo muy ameno contando los lazos que le unen a Córdoba comenzando por su primer encuentro con «Manolete» en un hotel de Écija. Narró los viajes en bicicleta que hacía junto a otros amigos para venir desde Écija a la plaza de «Los Tejares» a ver los toros. Soltó frases de cariño y complicidad hacia su esposa a la que colmó de adjetivos  con la que dijo que llevaba 36 años pero que la volvería a buscar de volver a nacer.

Anteriormente, el 22 de abril de 2017, el matrimonio estuvo en nuestra ciudad para asistir como invitado a la fiesta taurina benéfica organizada por Rafael González «Chiquilín» con motivo de su XXV aniversario de alternativa. Se celebró en la Finca Hacienda El Cordobés  a beneficio de Cáritas Parroquial (Iglesia de la Sagrada Familia) y de la Obra Social de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Caído.

Asistieron también Juan José Primo Jurado, subdelegado del Gobierno, Rafael de María, Párroco de la Sagrada Familia y Rafael Madueño, Hermano Mayor del Caído y numerosos toreros cordobeses. Los dos novillos que se torearon, cedidos por la ganadería de Los Recitales,  dieron un juego extraordinario  ante los que se lució «Chiquilín» como en sus mejores tiempos.   El segundo animal lo brindó Rafael al veterano diestro Jaime Ostos.

Terminada la capea se procedió a la fiesta flamenca muy animada con la intervención de un gran elenco de artistas invitados: Francisco Prieto «Currito», premio Nacional de Guitarra, «Tomate»,  «Merengue de Córdoba» con el cante de Mariano y el baile de Concha Calero y su hija Desiré, y cuantos quisieron salir a la pista a demostrar su arte como hizo el veterano diestro Jaime Ostos, que bailó rumbas y sevillanas.

Antes de que el Dj comenzara a animar a los presentes se procedió a rifar los regalos (más de setenta) y a Jaime Ostos le correspondió unos de los jamones que se sortearon. Y allá que se fue el torero más que contento con su rico jamón al hombro.

Sirvan estas anécdotas, con todo respeto y admiración, como un brindis a la memoria de un personaje irrepetible que cautivaba a todos con su agudo sentido del humor y caballerosidad y que ha dejado su trayectoria taurina escrita con letras de oro.

 Como profesional del toreo su relación con Córdoba fue fluida actuando muchísimas tardes en la desaparecida plaza de Los Tejares. Llegando a conquistar el preciado Trofeo Municipal «Manolete»  el 26 de mayo de 1959 ante un encierro del Marqués de Villamarta junto a Pepe Luis Vázquez y Antonio Ordóñez. Ostos cortó las dos orejas al tercero de la tarde y eso le hizo merecedor del Trofeo.

Posteriormente, el 26 de mayo de 1962 intervino en otra corrida histórica ya que fue testigo de la alternativa de José María Montilla al que doctoró Julio Aparicio. Esa tarde Montilla se hizo con el Trofeo Municipal «Manolete».

Como nota al margen no me resisto a contarles esto. El viernes día 7 llamo por teléfono a la doctora Mª Ángeles Grajal para decirle, tras identificarme, que deseaba hacerle una entrevista a su marido el maestro Jaime Ostos. Con toda amabilidad me dijo que estaban pasando unos días en Cartagena de Indias y que regresaban a Madrid el lunes día 10, que la volviera a llamar el martes día 11 para ponernos de acuerdo y fíjense lo que es el destino…el día 8 el gran torero deja de existir. La vida es así.

Descanse en paz.