Toros de Jandilla (1º, 3º, 5º, 6º) y Vegahermosa (2º y 4º), sin cara ni trapío, justos de fuerza pero con clase en la embestida.

Rivera Ordóñez “Paquirri”: Aplausos y palmas.

Sebastián Castella: Oreja y Oreja.

Cayetano: Ovación y división de opiniones.

 

La faena de Sebastián Castella al quinto –Dalivoso, nº 77 de 549 kilos- se fundamentó en el toreo al natural, seguramente la mejor faena que hemos visto en toda la feria. Dos series de cuatro naturales y el de pecho, pases cambiados por la espalda y toreo en redondo. Lamentablemente le asestó media estocada en el sótano. Cortó una oreja.

El primero de Castella salió frío y poco se puede resumir de su faena, salvo que de buenas a primera lo estrelló contra las tablas y que lo toreó muy bien en los medios con la mano derecha. Volvió a matar de un bajonazo y cortó una oreja.

 

El primero de Paquirri –da vergüenza escribir este nombre referido a este torero- salió parado y renqueante pero se recuperó en el buen tercio de banderillas que protagonizó el propio matador y fue un toro boyante para la muleta, pero entre Rivera y sus fans se dedicaron a tomar el pelo a los aficionados. Media tendida y aplausos.

Al tercero lo recibió con una larga cambiada y el clarinero le floreó el toque para matar, supongo que presagiando una extraordinaria faena. Sin embargo, el toro se fue aplomando y la faena comenzó entre pitos hasta que vimos como el toro rodó sin puntilla y sin que nadie entrase a matarlo. De chiste, de pena… ¡yo que sé!

 

El primero de Cayetano no dijo nada hasta el buen par de José Antonio Carretero. Entonces el matador comenzó a torearlo de modo efectista rodillas en tierra y con un toreo en redondo de mucho gusto. También se lució al natural y estuvo muy torero en una faena en la que exprimió al toro como si fuera un limón, pero que a la postre lo pinchó insistentemente. Sonó un aviso antes de los dos descabellos y recibió una ovación.

El sexto toro cogió malamente al buen José Antonio Carretero mientras le perdió la cara al lidiarlo. Desde ese momento el toro se hizo el amo, los banderilleros mostraron como el toro se les iba al pecho. Cayetano con cobardía tiró por el camino y sin más dilación lo mató de un pinchazo y estocada.

 

El parte facultativo de la cogida de Carretero: «Puntazo en la región cervical anterior derecha que afecta a la piel del tejido celular subcutáneo. Contusión craneal leve, pronóstico leve que no requiere hospitalización».