Informa desde Venezuela. Giovanni Cegarra. Periodista Taurino

Tras visita a las dehesas de las ganaderías tachirense y merideña Rancho Grande y Los Ramírez en Las Porqueras, Páramo La Negra del Municipio Jáuregui del Estado Táchira, Región Andina Venezolana, ver, palpar, conocer, escuchar e intercambiar los entrelones del arduo, difícil, sacrificado trabajo que en estos tiempos de crisis, implica el mantener una ganadería de lidia, reproducir y criar un toro de casta, no me cabe duda el afirmar, que poder es querer cuando se tiene muy bien sembrado el gusanillo taurino y se resiste, por encima de todo, a dejar morir nuestra Fiesta Brava.

Los propietarios de Rancho Grande y Los Ramírez, Don Hugo Domingo Molina junto a su hijo, Hugo Alberto y Ricardo Ramírez, respectivamente, ante la cruda crisis socio económica que se confronta en Venezuela, constituyen un claro ejemplo, sin que se me tome de hala chaqueta, que nunca lo he sido y ahora menos, dos generaciones ganaderas con tesón taurino, pilares fortificados en pro de la defensa, preservación, mantenimiento, fortaleza, de la Fiesta Brava Venezolana.

Se las tienen super difícil, ambos ganaderos e imagino, los otros existentes en el país, para echar adelante sus hierros, sorteando las múltiples vicisitudes que enfrentan en la crianza del toro de lidia, escasez de alimento, vacunas, velo y transnocho, por sacar ese toro que todos queremos observar en una corrida, sea toreado en buena lid, por un torero y se dice uno, se las juegan, en las buenas y en las malas, con pasión taurina.

Sin caernos a mentiras e insisto, poder es querer, cuando se quiere se puede, estamos en severa crisis e incertidumbre, imposible negarlo pero ello no implica que debamos sentarnos a esperar que el maná caiga del cielo, echarse a morir, hay que trabajar, producir, sin dependencia de nada. Nuestra Fiesta Brava le ha dado a muchos y ahora más que nunca, necesita de todos los taurinos, un ejemplo, de que las cosas se pueden en tiempos de crisis, lo ponen de manifiesto esta generación ganadera con tesón taurino, va por ellos, con Dios y olé.