Gabriel Picazo con el manso lidiado en primer lugar se mostró discreto, sufriendo una voltereta al entrar a matar, y con el cuarto sacó muletazos corriendo la mano pero sin cruzarse. Mató de pinchazo, aviso, estocada con el brazo suelto y descabello. Salió a saludar al tercio por su cuenta.

 

El segundo, mansote, llegó a la muleta de Emilio de Justo humillado y repitiendo con nobleza. Embistió sin cesar hasta quedar con media embestida, en faena larga que no arrancó ningún olé. Sonó un aviso antes de entrar a matar y después de sumar seis pinchazos sonó el segundo aviso y tras otros seis pinchazos más y tres descabellos sonó el tercer aviso, doblando el toro sin que aparecieran los cabestros de Florito. El quinto de salida se vencía por el derecho y le enganchó al diestro el capote llevándoselo entre las astas. Cumplió en varas el astado y llegó gazapón y flojo de remos con media arrancada a la muleta. Pases de querer y no poder ser para acabar de pinchazo, estocada y descabello.

 

Israel Lancho con el tercero que se dejó pegar y se repuchó en varas, inició la faena con un pase cambiado por la espalda. El toro se quedó corto y se venció. En la embestida por la izquierda daba tornillazos el astado. El torero pundonoroso intentó pero no consiguió nada. Pinchazo y estocada caída. El sexto que barbeó las tablas con intención de saltar peleó con genio en varas y el diestro extremeño realizó un vistoso quite. El astado tomó la muleta después de escarbar, sin codicia y doblándose de manos. Así no había nada que hacer y más echando la cara abajo. Acabó Lancho de una estocada.

 

Tarde tras tarde estamos viendo falta de detalles toreros y lidiadores, que nos hacen pensar que la Fiesta no está en un buen momento.