Existe una cuarta de aficionados que no dan la espalda a la fiesta en la plaza de Madrid, que sucesivamente presenta mas de tres cuartas partes del aforo llenas. Las condiciones negativas de los toros restan toda brillantez al toreo, que representa un balance decepcionante de los festejos.
En la festividad de san Isidro se lidiaron seis toros de la divisa manchega de «El Ventorrillo», encaste Domecq Diez. Pelearon desigualmente en varas y ante la muleta llegaron molestos de embestida o rajados que dieron al traste con la suerte del festejo.
Julio Aparicio estuvo ausente con el capote y desconfiado con
Curro Díaz torero hecho y con buen son, se las entendió con el segundo que siguiendo a buen capote se estrelló contra un burladero. Llegó al último tercio corto de arrancada y con malas intenciones. Lo porgió y como no había mas que hacer lo dejó a merced de las mulillas de pinchazo y una estocada baja.
Pitos al toro. El quinto manso se salió suelto en varas. Reservón en banderillas, ante la muleta se quedó corto y derrotando yéndose del diestro comprometido. Con media arrancada no dio oportunidad de lucimiento y lo despachó de una estocada sin puntilla.
Eduardo Gallo que sustituyó al anunciado Ángel Teruel, resentido de una gravísima cornada en
Así terminó el festejo del día del patrón de Madrid, una decepción.
José
Decano de
Periodista – Escritor
Escalera del Éxito 103