Pregunta
El pasado mes de junio se celebra en Zamora la corrida de toros de las ferias de San Pedro. La Banda de Música de Zamora, es una banda sin experiencia en este tipo de espectáculos, ya que la primera vez que actuó en uno de ellos fue en el 2008. En este año 2009 somos contratados para participar en las corridas de toros de nuestra ciudad, para lo cual somos asesorados por miembros del recién creado foro taurino de Zamora y el director de la Banda de Música de Toro, el cual tiene más experiencia que nosotros en dichos espectáculos.
Este año, como novedad, se invita a las peñas de la ciudad a participar en los toros, y estos a su vez están con instrumentos musicales, (dulzainas, tambores, bombos…) y el problema surge cuando la banda de música no toca, (no toca cuando a juicio de nuestros asesores la faena no lo es lo suficiente lucida), entonces las peñas empiezan a tocar… En algún momento cuando el torero iba a matar incluso suenan silbatos, mientras están cortando las orejas las peñas se ponen a tocar, lo cual dificulta que la banda pueda tocar con claridad mientras el torero da la vuelta al ruedo, solicitando varias veces a las peñas que hicieran silencio para poder dignificar el acto lo máximo posible. Ante la negativa por parte de las peñas, optamos por la opción de dirigirme al presidente y contarle lo que sucedía, el cual se desentiende totalmente.
Ante esta situación, me gustaría que me dieran su opinión al respecto, si en algo nos estamos equivocando…o que solución es la mejor para que estas situaciones no se repitan. En ningún caso estoy culpando a las peñas, que creo que actuaban desde el desconocimiento….
José Ignacio Petit
Director de la Banda de Música de Zamora
Respuesta:
Estimado D. José Ignacio:
Le anticipo que el Reglamento Taurino no contempla ninguna normativa respecto a la banda de música, es más, no hay ninguna referencia en que obligue su presencia en la plaza de toros.
Respecto al segundo punto, en muchas plazas han sufrido las molestias de grupos de peñas cuyo comportamiento durante la lidia deja a veces mucho que desear. En otros lugares, cuya actitud ha sido similar al caso que me expone, lo han solucionado reuniéndose el concejal responsable de la organización de los festejos con las peñas, llegando a un acuerdo, en que durante la lidia no se puedan hacer uso de los instrumentos de música o ruidos incómodos, ni molestar al torero, por respeto al que está jugándose la vida. De esta forma, y con el debido silencio, usted puede desarrollar su cometido sin interrupciones. Otra cosa es cuando el toro ha muerto; la algarabía que se forma es muy difícil de controlar. Pero lo más importante es escuchar la música durante la faena.
Fernando García Bravo
Documentalista Taurino