Conchita Cintrón en Tarma

 

 

 

 

“¡Cuando se oigan clarines

Y pasodobles.

En primavera, ¡Recuérdame cuando me muera!”

 

Conchita Cintrón – Guadalajara, 1974. (8)

 

 

Indagando en el pasado a través de las diversas fuentes de las que podemos disponer y del testimonio de los viejos aficionados de nuestra provincia pude constatar que efectivamente “Conchita Cintrón” pisó las arenas de la plaza de toros “Juan Belmonte”  de Tarma. Para ilustración de los amables lectores dirè que Concepción Cintrón Verril más conocida como “Conchita Cintrón”, nació en Antofagasta, Chile un 9 de Agosto de 1,922 (año en que la plaza de toros de Tarma estaba en plena construcción), de padre portorriqueño y madre norteamericana (Loyola Verril) de origen Irlandés, su Cintrón por los toros y caballos se inicia a muy corta edad, su padre (Frank Cintrón) era militar y desde antes del año de edad montaba a caballo con èl (1). Cuando tenía año y medio de edad, se radican en el Perú, en la ciudad de Lima, asimilando todas las costumbres de nuestra patria, desde las comidas, los bailes. y todo nuestro acervo cultural. De esta etapa de su vida guardò grandes e imborrables recuerdos, y quiso tanto al Perú, que siempre se consideraba peruana cada vez que se le preguntaba sobre su origen.

En 1934 conoce al gran rejoneador (torero que ejecuta las diversas suertes taurinas a caballo) Ruy da Càmara, quién le imparte clases  de equitación y por otro lado el torero español Diego Mazquiaràn “Fortuna”el cual le impartió sus primeras lecciones de toreo a pie, llegando a dominar con tanta destreza a los equinos y manejar la muleta con tanta finura y arte que solo una dama puede tener.

Cuadro de texto: Paseíllo en Acho 1936Se presentó por primera vez como rejoneadora  en enero  de 1936 con motivo de un festival benéfico que en ese entonces se realizaba, tuve la gran suerte de encontrar la fotografía  respectiva, por gentileza de Hugo  Dafieno, quién en la Casa Hacienda “La Florida” guarda testimonios escritos y fotográficos de la vida de su padre, el gran matador de toros Fulvio Dafieno, quién con una prolijidad asombrosa narra con lujo de detalles, su quehacer taurino y la historia del Perù y Tarma taurinos .En este álbum bien documentado  se aprecia a Conchita, a caballo en pleno paseíllo, en la Plaza de Acho, seguida de una cuadrilla de toreros donde se encuentra Fulvio Dafieno.

La confirmación de que Conchita Cintròn toreó en Tarma, la obtuve en el Portal Taurino de Internet, de Pastor y Landeo donde al escribir sobre la biografía de Concepción Verril, textualmente cita :”Debut como novillera: en la Plaza de Tarma (Perú), el 31 de Julio de 1938”.(2). El testimonio fotográfico inobjetable me la dio Don Mario Macassi, hijo de Don Pedro Macassi, quién al mostrarme una de las fotos de propiedad de su ilustre padre, se aprecia a la mìtica Conchita Cintrón, “La Diosa rubia del toreo”, haciendo su ingreso montada en un brioso corcel castaño oscuro, nada menos que al redondel de la Plaza de toros “Juan Belmonte “de Tarma en ese preciado instante donde se agolpan todas las emociones posibles llamado “paseíllo” . Esta fotografía fue verificada por Hugo Dafieno, ahijado de esta deslumbrante mujer torero. Al fondo se aprecian los cerros de nuestra ciudad con sus clásicos eucaliptos y la Plaza aún está a medio construir, y como menciona Fortunato E. Càrdenas en su libro “Tarma-Palca-Chanchamayo-El Pichis-El rìo negro” (3) esta plaza fue mandada a construir por el subprefecto de Tarma, Oscar M. Arrieta,  allá por la década de 1920 siendo completada por los municipios que lo sucedieron, quienes construyeron galerías  y burladeros, estando

operativa a partir de 1924.

 

 

Volviendo a este preciado momento, Don Carlos Meza Cuello evoca a su memoria, y recuerda que cuando niño, tuvo ese privilegio de ver torear en Tarma a la mejor rejoneadora mujer que se ha visto en el mundo, en sus emocionadas palabras y lagrimas de anciano que vio mucho, cuenta que esa tarde el público abarrotaba los tendidos de nuestra Plaza, eran días festivos, conchita estaba vestida con su traje campero que la inmortalizó, es decir con su sombrero Jerezano negro, su clásico moño, una chaquetilla plomo oscuro, botas negras y unos zahones marrones (cubierta de cuero que protege la parte anterior de los miembros inferiores).  Era hermosa, muy hermosa y joven, pues bordeaba los 16 años, lidió a un presentable toro negro al que realizó una faena extraordinaria ante los encandilados aficionados tarmeños (en ese entonces solo se jugaban 4 toros), aplicó al iniciar su faena el rejón de castigo (varilla  que en su extremo tiene una punta desprendible), desplegándose en el extremo del mismo la bandera peruana, ante el aplauso del respetable. Luego puso desde su cabalgadura, las banderillas convencionales, luego las banderillas cortas de una forma magistral y arriesgada, haciendo gala de su gran dominio del caballo y de todo el arte del rejoneo. Con un público delirante, bajó de su bello caballo entrenado y se aprestó a la faena de muleta, siendo esta una faena sensacional con pases de todo tipo ,bordados y de antología, al son de los acordes de una marinera interpretada por la banda de turno; teniendo al  toro aplomado, lo fulmina al segundo intento con un estoque hasta la empuñadura doblando al instante, lo que le valió las respectivas orejas de premio. Teniendo a un público jubiloso, el cual le arrojaba bufandas, sombreros y tantos honores del que gustosos se desprendían, dio la vuelta triunfal al ruedo de nuestra Plaza de toros. Siendo  premiada por el alcalde de ese entonces, saliendo en hombros y por la puerta grande de la Plaza de toros “Juan Belmonte”.

 

 

Esta corrida fue el acontecimiento más grande de esos días de Tarma de antaño y los niños de aquella época, se disputaban por representar a Conchita Cintrón, en sus juegos propios de esa maravillosa edad.

Conchita Cintrón, continuó esa brillante carrera toreando en diferentes cosos del Perú y del extranjero, llegando a tal nivel su fama, que los tarmeños que la vieron torear, no podían creer que hayan tenido la dicha de tenerla entre nosotros.

Se cuenta que cuando Conchita ingresaba al ruedo con sus caballos perfectamente adiestrados, se ponía a bailar una marinera ante el beneplácito de los espectadores y solía poner banderillas siempre de color rojo y blanco en honor de la bandera peruana. En la foto, se la puede apreciar

banderilleando desde un corcel blanco y castaño en artística maniobra taurina. Se considera que en toda su vida profesional como rejoneadora (13 años), mató a 1200 toros, sin sufrir percances mayores. En México la bautizaron como “La Diosa de Oro” por su singular belleza, su cabello rubio y su excepcional conocimiento de la lidia y su dominio de las cabalgaduras.

Paseo con prestancia, profesionalismo y rotundo éxito el nombre del Perú por los ruedos del orbe, codeándose de igual a igual con las primeras figuras del toreo de su época (4).En la foto se aprecia a Conchita Cintrón al lado de ese coloso de la tauromaquia, como lo fue el Maestro Juan Belmonte, gran matador de toros que por su incomparable fama los tarmeños de antaño tuvieron a bien bautizar a nuestra desaparecida Plaza de Toros como “Plaza de Toros Juan Belmonte”. La genial  mujer torero, forjó su carrera en México donde cosechó grandes lauros y los empresarios de las plazas mexicanas

 

 

 

 

 

se la disputaban por verla torear. Al retornar al Perú cargada de triunfos, inaugura la Plaza de toros Monumental de Chacra ríos,  el 14 de Marzo de 1948 , fecha en la que el hijo predilecto de Tarma General Manuel A. Odrìa estuvo presente y pudo contemplar extasiado todo el arte de esta gran rejoneadora que conjuntamente a grandes diestros de la talla, de Raùl Ochoa “Rovira”, Alejandro Montani, Agustín Parra “Parrita”,Paquito Muñoz, Gregorio García y Antonio Velásquez,, iluminaron esa gran tarde taurina. Concepción Verril, toreó en la mayoría de Plazas de España así como de Francia, Portugal, Colombia, Ecuador y Venezuela.

Se despidió de los ruedos el 18 de Octubre de 1950, en Jaén, España,  en una tarde muy emotiva, en la que toreó a caballo y a pie (pese a la prohibición existente por su condición de mujer), donde ella desobedeciendo al juez de plaza tomó la muleta y prodigó a su toro varios muletazos ante un público  alborotado y emocionado , matando al toro de una estocada certera, siendo premiada con los máximos premios y exonerada del correspondiente arresto por su descomunal faena.  Refieren las crónicas (5) que muchos de los espectadores lloraron de tanta emoción la tarde que Conchita Cintrón toreó por última vez.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El 5 de setiembre de 1951 Concepciòn Verril se casó con el caballero portugués Francisco de Castelo Branco, sobrino de su maestro Ruy da Càmara y actualmente vive con su familia en Portugal, cerca de Lisboa.

Un dato más de Conchita Cintrón y Tarma es que según refiere Hugo Dafieno, actual dueño de la acogedora y bonita Casa Hacienda “La Florida”, Conchita y su padre Fulvio Dafieno, fueron grandes amigos ,tal como se corrobora en la foto adjunta (cortesía de Hugo Dafieno), y tanto fue su acercamiento que hizo que la rejoneadora fuera la madrina de Bautizo de Hugo Dafieno, hecho por demás invalorable y sin precedentes en nuestra provincia.

En la foto se aprecia al matador Fulvio Dafieno (segundo de la izquierda), al lado de Conchita Cintrón (con sombrero y chaqueta clara).

Antonio Burgos en su página Web “El Red Cuadro” termina en una de las tantas biografías de esta espléndida torero, diciendo:”Su gran calidad y presencia en todos los cosos mundiales ha hecho de ella una figura inmortal, de una mujer, que puso el listón del toreo femenino a una altura de auténtico magisterio y ejemplo para todas aquellas, que la quisieran igualar”(6).

Recientemente en Febrero del 2006, Conchita Cintrón, ha recibido en Madrid, el premio de “La Escalera del Éxito”, cercana ya a los 80 años, como un justo reconocimiento a su inmensa y gran trayectoria en el mundo de los toros(7).

 

 

 

 

Por todo lo escrito apreciado lector, podemos decir con orgullo manifiesto, que el cielo de Tarma y las arenas de su Plaza de Toros “Juan Belmonte” tuvieron el privilegio  de contar con la presencia, de la mítica Concepción Cintròn Verril más conocida como “Conchita Cintrón” un 31 de julio de 1938, iniciando en nuestra ciudad su inigualable carrera, hecho que quedará guardado por siempre en la historia de la tauromaquia de nuestra provincia y del mundo entero.

 

 

 

Dr. Moisés Tacuri Garcìa

 

 

 

 

Bibliografía:

  1. Zapata de Càceres, Magaly: “Entrevista a Conchita Cintròn”, Mundotoro.com, 22 deDiciembre de 2005.
  2. Pastor y Landeo :”Conchita Cintròn”, Portaltaurino.com.
  3. Càrdenas , Fortunato E.: “Tarma-Palca-Chanchamayo-El Pichis-El rìo negro”,Imprenta la Voz de Tarma,1943. pag 145.
  4. Aramburù Tizòn, Raùl:”Biografía de Conchita Cintròn”,Mundotoro.com, Diciembre del 2005.
  5. Mujica Gallo, M :”Conchita toreò a pie en Jaen y fue multada por espontánea”, Revista Acho, Nº75, Lima, 10 de Noviembre de 1950.
  6. Burgos, Antonio: “Biografía de Conchita Cintròn”,Elredcuadro.com, 2002.
  7. Aramburù Tizòn,Raùl :”Expreso Toros”, Lunes 27 de Febrero del 2006.

Mi profundo agradecimiento a Mario Macassi, Hugo Dafieno, Oswaldo Còrdova y Carlos Meza en la realización del presente artículo.

       8.  Cintròn, Conchita: “¿Por qué vuelven los toreros?”, Editorial Diana, Mèxico año 1977.