Abrió plaza un desmotivado, frío y abúlico Juan Serrano “Finito de Córdoba” que se limitó a cumplir con el primero de la tarde. Mal colocado y evidentemente desconfiado, el diestro se dio  a aparentar que quería torear, pero citando siempre escondido y echándose el toro fuera es imposible. Cierto que su antagonista no fue bueno pero tantas precauciones no venían a cuento. Peor estuvo ante el cuarto, ausente y sin sitio, decidiendo abreviar. Mató de pena y escuchó una sonora pitada.

Antonio Ferrera salió a torear con una cornada sin curar y eso le dio mayor merito a su buena actuación. Lanceó con garbo a la verónica al segundo, un sobrero de Vegahermosa que se lidió al partirse el titular un pitón. Entregado y vistoso en banderillas, Ferrera toreó con temple, gusto y ligazón al buen toro al que llevó con mano baja en varias series emotivas. Certero con la espada paseó dos orejas y al toro le premiaron con la vuelta al ruedo. Ante el quinto destacó de nuevo toreando con el capote, colocando hasta cinco pares de banderillas, los dos últimos al quiebro. El toro acusó en el tercio final las carreras del segundo acto de la lidia y se paró. Ferrera se metió en los pitones y literalmente lo “exprimió”. Tras pinchazo y estocada cortó la tercera oreja de su tarde.

Recuperado y con la moral a tope, Manuel Jesús “El Cid” toreó con voluntad y vibración al tercero en una faena corta pero siempre animosa. Mató mal y perdió un trofeo. Toreó superiormente con el capote al sexto en verónicas hondas, mecidas y profundas y sobre todo cuajó un fabuloso quite de dos verónicas y dos medias de autentico lujo. Abierto en los medios citó de lejos al de Vegahermosa para cuajarle varias series estupendas de derechazos, largos, de mano baja, con ritmo y temple. Pinchó una vez y colocó al segundo intento una gran estocada. A pesar del fallo del puntillero cortó dos orejas. La suya fue una gran actuación.

 

 

 

FICHA DE LA CORRIDA

 

 Plaza de Toros de Mérida (Badajoz), sábado 4 de septiembre

 

 Cuatro toros de Vegahermosa y dos de Jandilla (segundo y tercero) discretos de presentación y de juego desigual. Destacó el noble segundo, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre y el bravo sexto. Deslucido el primero, soso el tercero, complicado el cuarto y noble el pero tardo el quinto.

 

Juan Serrano “Finito de Córdoba”, de fucsia y azabache (Silencio y pitos)

Antonio Ferrera, de blanco y oro con remates negros (Dos orejas y oreja)

Manuel Jesús “El Cid”, de tabaco negro y oro (Saludos y dos orejas)

 

 

En el sexto saludaron en banderillas Alcalareño y Pirri. Antonio Ferrera y El Cid salieron a hombros por la puerta grande.