En la que pudo ser la tarde para refrendar su titulo de triunfador, se convirtió en una tarde accidentada colmada de altibajos y uno que otro detalle con la muleta para Conrado, pues el público asistente a este festejo esperaba ver un toreo más evolucionado en el capote y muleta del Luís, ya que desde su debut en este mismo ruedo ha toreado un total de 30 Novilladas.
Con su primer astado, Conrado, estuvo voluntarioso con el capote citándolo por Gaoneras lo que provocaron que el novillo lo empitonara sin que tuviera consecuencias que lamentar. Su labor con lasarga dejó mucho que desear, ya que el novillo tuvo mucho recorrido y una embestida muy franca que no supo entender. A la hora de ejecutar la suerte suprema tuvo grandes fallas con el metal y con el descabello, lo que provocó que el Juez de Plaza le tocara tres avisos para que regresara vivo su novillo a los corrales.
Por su parte el joven ecuatoriano Juan Francisco Almeida recibió con una larga cambiada de rodillas a su novillo, con la muleta le pegó una buena tanda de derechazos y cuando se disponía a pegarle otra tanda el novillo hizo por él elevándolo en el aire y al momento de caer se fracturó la muñeca de la mano derecha, lesión que le impidió continuar y que lo mantendrá alejado de los ruedos de seis a siete semanas. En el segundo de su lote, un novillo magnífico con un excelente lado izquierdo y una noble embestida Conrado se reencontró con su toreo, iniciando su labor muleteril con una tanda de naturales, para luego pegarle un par de manoletinas y joselillinas, para después tirarse a matar por pitón derecho dejando una estocada entera lo que provocó que el noble burel rodara sin necesidad de usar la puntilla. Acción que tuvo como consecuencias que el juez otorgara una oreja y minutos después concediera la segunda a exigencia del público, ordenando también arrastre lento para el noble burel.
Con el astado que le correspondía a Juan francisco Almeida, Luís volvió a demostrar sus deficiencias con la espada, pues el novillo lo prendió dos veces al tirarse a matar, quedando colgado de los pitones unos segundos, rasgándole la taleguilla y provocándole un fuerte rayón en el muslo izquierdo, con el descabello tampoco hubo precisión y escuchó un aviso.
Se lidiaron cuatro magníficos ejemplares de la dehesa jalisciense de Rosas Viejas, propiedad de Don Fernando Topete, Divisa: Blanco, verde y oro, destacando el que se jugó en tercer lugar Historiador Número 359 con 416 kilos, quien mereció los honores del arrastre lento.
Destacaron también los subalternos Raúl Bacelis y Cristián Sánchez quienes saludaron al tercio por los espectaculares pares de banderillas que colocaron.
Para la reflexión Luís Conrado tiene mucha actitud, un gran valor y transmisión a los tendidos, que lo pueden llevar a ser una gran figura del toreo, pero estas capacidades deben ser bien encausadas por su apoderado y maestro el Matador Antonio Urrutia, y digo esto porque lamentablemente triunfos como el que obtuvo esta tarde Luís ante Novillos con presencia y que hay que saber entender, hacen notar las deficiencias que tienen las jóvenes promesas del toreo nacional y desafortunadamente es el mismo toro quien a veces de manera muy dolorosa los hacen volver a su realidad, que suele ser en la mayoría de los casos el que corta los sueños de poder llegar a trascender en la dificultosa y apasiónate Fiesta Brava.
Para la segunda Novillada, la Empresa de la Plaza de Toros Arroyo anuncia el siguiente cartel:
Novillos de Yturbe Hermanos para Alfonso Mateos, Martín Campuzano, Cristian Hernández y José Fernando Alzate.
Desde México, informa José Ricardo Gómez Cardona Canta Claro
(Texto y Fotos)