Doña Manuela Carmena:

Me tomo la licencia de dirigirme públicamente a usted, y a La Junta de Gobierno Municipal, para que sepan de primera mano los principios, medios y fines de la Escuela Taurina de Madrid. Lo hago casi en telegramas, porque desgraciadamente  casi todos nos movemos contra reloj, y lo hago para que la decisión que tome acerca del asunto, la haga con un mínimo de reflexión y conocimiento de causa… y no desde posiciones forzadas, precipitadas, tergiversadas, equivocadas, indocumentadas o fanáticas.

1º) En los albores de 2.016 la Escuela Taurina cumplirá 40 años.

2º) En 1.976 un grupo de bienintencionados, modestos, e idealistas profesionales recuperamos en ratos de ocio la abandonada placita de toros de la Casa de Campo. Además, pusimos por coleta, aproximadamente, lo que hoy serían 600 euros para afrontar los primeros presupuestos y gastos. En mi caso, también obsequié a la Escuela con un capote, una muleta y varios libros. Creíamos que la figura de maletilla haciendo dedo para ir a una tienta o a una capea estaba fuera de tiempo y lugar… aunque la imagen gráficamente sea atractiva. Creíamos que con la Escuela Taurina tendrían casi igualdad de oportunidades los chavales sin medios que los chavales de dinastía o los chavales que directa o indirectamente son ricos o riquillos. Es decir, cerrar la Escuela es cerrar posibilidades a una parte de la justicia social. Ser profesional de la Tauromaquia es tan lícito y honesto como ser profesional de cualquier otra ciencia, arte, oficio, evento o invento. Si volviese a nacer lo volvería a intentar…por su gallardía, elegancia y originalidad… y porque ser torero es menos cruento que ser matador de la razón, de la educación, de ilusiones y sueños, de inofensivos pájaros y peces, de elefantes y otros rumiantes, o de personas… a través de la incertidumbre, el desasosiego y la desesperación en situaciones derivadas del paro, la codicia o la desestabilización laboral y emocional. Dª Manuela, como usted sabe, es la enorme desigualdad que padecemos o tragamos el mayor delito contra la Humanidad.

3º) Más pronto que tarde, de la Escuela Taurina surgió una terna de becerristas que actuaron por medio España con éxitos artísticos y económicos: Yiyo, Sandín y Maestro. La escuela empezó a ser una golosina para propios y extraños; se le concedió un bingo –yo me negué a tal aberración-, había dinero, pero por lo visto el muy trabajador y opaco Enrique Martín Arranz, al que habíamos dado libertad de acción no rendía cuentas a los que le habían aupado en su fulgurante carrera. Hubo ruptura del uno y los demás. Yo, por motivos de trabajo viajaba mucho, me enteraba de la misa la mitad o menos, intenté la reconciliación y no hubo diálogo ni consenso de futuro. En pocos años surge otra terna que repite éxitos artísticos y económicos: Joselito, Fundi y Bote. Enrique Martín Arranz se hizo apoderado de Joselito, que a los los 20 años de edad ya era un  torero muy solicitado y cotizado. Enrique, se vio desbordado por tanta actividad y entregó la Escuela al Ayuntamiento de Madrid presidido por D. Enrique Tierno Galván. Ignoro si Tierno sabía los tejes manejes de la Escuela, el caso es que siguió funcionando…pero los cofundadores de la Escuela nos quedamos sin posibles reconocimientos o indemnizaciones. En efecto, los avalistas de Enrique Martín Arranz nos quedamos a dos velas. Hoy somos abuelos, alguno ya fallecido, otros viven lejos de Madrid o les hemos perdido la pista, los menos nos saludamos de vez en cuando en Las Ventas.

4º) La filosofía y espíritu de la Escuela era formar a los chavales en el conocimiento y cánones del arte de torear, y en el de saber ser y estar con dignidad en la vida…ya fuesen toreros, apoderados, organizadores, informadores, mozos de espadas, aficionados, emprendedores o fontaneros…siempre respetando y respetándose. Otra cosa es que los chavales tomen buena nota o se maleen. Enrique cometió errores de bulto… como entregar la Escuela al Ayuntamiento de Madrid sin consultar a sus compañeros cofundadores. Tal vez hubiésemos llegado a un acuerdo para entregarla a  la Comunidad de Madrid que es la dueña de Las Ventas y el dinero destinado a la Escuela para su continuidad no sería polémico porque es poquita cosa comparada con los ingresos que genera…cada años menos por cierto. O poner en marcha alguna idea que barajamos… como un aporte mínimo de los profesionales que se forman en la Escuela para que sea autosuficiente o celebrar festivales de categoría para ayudarla.

5º) Los muchos años que el PP ha gobernado y manejado Ayuntamiento y Comunidad de Madrid hace que haya chavales y simpatizantes de la Escuela creyendo que el ex alcalde A. del Manzano y la ex presidenta de la Comunidad E. Aguirre sean el padre y la madre del ente que les da  formación y cobijo. Nada más lejos de la realidad. Y como creen más en la opacidad privada que en la transparencia pública lo primero que hicieron es borrar el nombre genérico de Escuela Taurina de Madrid por el de Escuela Taurina Marcial Lalanda…ilustrísimo torero nacido en Vaciamadrid que nada tuvo que ver con la puesta en marcha y funcionamiento de la Escuela. El grupo o casi todo el grupo de bienintencionados, modestos e idealistas profesionales que hicimos la Escuela no simpatizaba con AP origen del PP actual. Esa es la pura verdad.

6º)Las personas más conocidas de la Escuela –al margen de los profesores prácticos propiamente dichos-  además de Enrique Martín Arranz, son el amigo desaparecido Manuel Molinero –neutral en el conflicto de uno con los otros-, cofundador que cumplió su cometido hasta el final sin una duda o sospecha en su buen hacer. Lo mismo que Felipe Díaz Murillo, se incorporó unos años más tarde como máximo responsable de la Escuela…aunque no sé si influyó en el nuevo nombre y en la “imagen política- popular” de la Escuela. Dimitió hace un tiempo porque el PP le recortaba la subvención hasta límites insostenibles o insuficientes para la continuidad de lo que había sido la Escuela Taurina de Madrid.

7º) Doña Manuela Carmena, es usted alcaldesa por las decepcionantes negligencias, carencias, despilfarros o presuntas corrupciones que ha generado el bipartidismo en el  Ayuntamiento de Madrid. Y muchos madrileños estaban hasta la montera de más de lo mismo o peor. Es usted persona inteligente y decente. Es usted juez. Con estos datos, puede hacerse un lugar de composición antes de precipitarse en una decisión que mande a chavales limpios a engrosar los chavales que ensucian, envilecen o envician calles de Madrid. Claro que son mayoría los chavales majos madrileños. No creo que cargarse la Escuela Taurina sea una prioridad para  el conjunto de votantes y habitantes de Madrid. Recuerde que según toda o parte de la élite  del PP, todos los males de España, desde Viriato al Siglo XXII como mínimo… es culpa del “socialista” Zapatero; con el mismo hierro la pueden marcar a usted respecto a la Tauromaquia y hacerla culpable de la muerte de Sánchez Mejías y la decadente gestión de Las Ventas.… porque entre los responsables “populares” escasea la  autocrítica y abunda la acusación o insulto a los demás con todavía… hipocresía impune y altanera. No entre al trapo de sus interesadas y privadas tramas, trabas y trampas. Tampoco entre al trapo de argumentos superficiales o legos. Deseo que encuentre una solución inteligente y viable para el caso. Para terminar, antes de tomar una decisión, recuerdo que la opinión tauromáquica de Lorca o el viejo profesor es, o parece  más culta, libre y certera que la opinión de vivales foráneos y sus discípulos españoles. No he sabido ser más breve. Gracias por su atención.