Por Carlos Alexis Rivera – CNP 10746

En un mundo que durante siglos ha sido territorio casi exclusivo de los hombres, la irrupci贸n de Olga Casado marca un antes y un despu茅s. La torera espa帽ola no solo se abre paso en los carteles m谩s prestigiosos, sino que lo hace con la autoridad de quien ha demostrado que su muleta y su capote son capaces de dialogar con la historia.

聽Su trayectoria reciente es un mapa de conquistas. El 9 de marzo de 2025, en la Feria de Olivenza (Badajoz), realiz贸 su primer pase铆llo como聽novillera聽con picadores y cort贸 una oreja. Meses despu茅s, el 12 de octubre en Las Ventas de Madrid, logr贸 salir a hombros tras compartir cartel con Curro V谩zquez, C茅sar Rinc贸n, Enrique Ponce y Morante de la Puebla. Aquella tarde fue m谩s que un triunfo: fue la confirmaci贸n de que la tauromaquia pod铆a abrirse a una nueva voz femenina con categor铆a de figura.

聽Las cifras avalan su discurso: 18 actuaciones, 37 orejas y 2 rabos en la temporada espa帽ola. Pero m谩s all谩 de los n煤meros, lo que distingue a Casado es su estilo: elegancia, personalidad, facilidad y est茅tica. Su toreo no es una copia ni una concesi贸n, sino una propuesta propia que se inscribe en la tradici贸n y la renueva. El salto a Am茅rica ha multiplicado la expectaci贸n. En septiembre debut贸 en la Feria Taurina de Tovar (Venezuela), y en octubre brill贸 en la Feria de Latacunga (Ecuador), donde comparti贸 puerta grande con Alejandro Talavante en una tarde hist贸rica.

聽Ahora su nombre encabeza los grandes ciclos: el 14 de diciembre de 2025 en la Plaza de Toros Nuevo Progreso de Guadalajara (M茅xico); el 28 de diciembre en Ca帽averalejo (Cali, Colombia) junto a Alejandro Talavante y Luis Bol铆var ante los toros de Ernesto Guti茅rrez; entre el 5 y el 11 de enero de 2026 en la Feria de Manizales (Colombia); y en Venezuela har谩 el pase铆llo en la Feria de San Sebasti谩n y la Feria del Sol, plazas donde la afici贸n la espera como un s铆mbolo de renovaci贸n.

聽La presencia de Olga Casado en estos escenarios no es solo un acontecimiento taurino: es un fen贸meno cultural. La tauromaquia, tantas veces acusada de inmovilismo, se enfrenta a la evidencia de que una mujer puede ocupar el sitio m谩s alto del escalaf贸n. Y no por concesi贸n, sino por m茅rito.

聽En este punto, resulta inevitable recordar a Cristina S谩nchez, pionera que abri贸 la puerta en los a帽os noventa, y a Mari Paz Vega, que resisti贸 durante casi tres d茅cadas en los ruedos de Espa帽a y Am茅rica. Ambas demostraron que la mujer pod铆a estar en el centro del espect谩culo, aunque el sistema no聽terminara聽de aceptarlo. Olga Casado recoge ese legado y lo transforma en revoluci贸n: no pide permiso, se gana el sitio con faenas hondas, templadas y verdaderas.

聽En cada pase铆llo, Casado no solo se juega el triunfo: se juega la posibilidad de reescribir la historia. Su muleta es un manifiesto, su capote una declaraci贸n de principios. La pregunta ya no es si podr谩 llegar a ser la mejor torera del mundo. La pregunta es si estamos preparados para aceptar que el futuro del toreo puede tener rostro de mujer.