El primer toro por flojedad manifiesta de remos fue retirado al corral. Se corrió turno y salió el que se iba a lidiar en sexto lugar. David Mora lo recibió igualmente a puerta gayola. El toro se fue de los capotes, en varas se salió suelto y se dolió en banderillas. Faltó entendimiento entre torero y toro, este se mostró agresivo a la salida de cada pase y propinó dos desarmes al diestro. Certera estocada al volapié, el toro tardó en doblar y sonó un aviso. Saludos desde el tercio. En quinto lugar por correrse turno salió el sobrero de Fernando Peña que si iba a lidiar en sexto lugar. Trotón de salida entró al caballo y se salió suelto. En la tercera vera se durmió en el peto. El comienzo de la faena fue espectacular a un toro con malas intenciones y que desarmó al diestro que se mostró valiente, que aguantó y resultó atropellado. Dobló de una estocada este segundo de su lote.

 

El segundo de la tarde tapaba su presencia por la cabeza por ser escurrido de los cuartos traseros. Tras dos puyazos en los blandos el toro llegó a la muleta de Miguel Abellán venciéndose por el derecho y quedándose corto y buscando por el derecho. En un muletazo el toro corta el viaje y lo derriba y le propina una cornada al diestro en la pierna izquierda. Atacando con el brazo suelto cobra dos pinchazos y una estocada atravesada y descabello, pasando a la enfermería de la que no salió.

 

El Capea, con el tercero toro regordío y corto de cuello, que cumplió en varas, faena sin cruzarse con el toro y citando fuera de cacho. Perfilado fuera del pitón deja una estocada corta y dos descabellos. Lidia al cuarto en sustitución de Miguel Abellán, toro ligero de remos, poco castigado en varas. El toro va con fijeza a la muleta y se registran series de pases corriendo bien la mano. El diestro resulta volteado sin consecuencias y continua completando muletazos hasta acabar de una estocada que mata sin puntilla. Le conceden la oreja. El quinto se corre en sexto lugar. Lo recibe con una larga de rodillas en el tercio. El toro se deja picar y blandea de manos. En banderillas se duele al pincho y embiste a la muleta cabeceando y con genio. Intenta con voluntad pases y más pases, un número que no procede dada la condición del toro que dobló de pinchazo, estocada y descabello.

 

Con la plaza llena volvimos a padecer faenas de demasiados pases a toros deslucidos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Crónica de José Julio García

Decano de los críticos taurinos de España