Madrid 23 de mayo 2014. Feria de san Isidro. 14º festejo
Miguel Ángel Perera muy en toreo corta tes orejas y sale a hombros. Toros escogidos para nada, El Juli vulgar y Manzanares apagado. Lleno total en la Monumental.
Cuando la corrida transcurría en un tono gris sorprendió Miguel Ángel Perera con una actuación muy torera y completa que ha demostrado en Madrid para convertirse en un torero a tener muy en cuenta. El tercero de la tarde como el resto del encierro fue un toro que se entregó ante el capote y el diestro extremeño saludó por verónicas. El toro cumplió en varas y se vio un quite por chicuelinas muy aplaudido. También El Juli se lució en el quite de este toro. La faena la inició por estatuarios y la continuó por naturales ligados citando con la muleta adelantada y cruzado ligando los pases acompañado de una buena embestida del bares. Alargó la faena y escuchó un aviso cuando dobló el toro de un estocada fue premiado con dos orejas. Con el sexto se volvió a lucir con el capote. El toro manso tomó la muleta con bondad, lo mismo ante los estatuarios como en las tandas de derechazos y naturales cerrados con el de pecho. Tras unas. Año letrinas alargando la faena dejó una estocada en el morrillo yéndose detrás de la espada sonó un aviso y fue premiado con oreja.
Al final del festejo salió en hombros por la Puerta de Madrid, mal llamada Puerta Grande.
Los toros escogidos de Victoriano del Río para este festejo tuvieron movilidad, flojos de fuerza y manejables. El primero fue devuelto al corral debido a su mansedumbre de toro rajado falto de fuerza. Salió un sobrero de Zalduendo flojo de fuerza y rajado de embestida. El Juli se topó con este ejemplar que sustituía al primero desechado al corral. Lo pasaportó con unos muletazos y lo dejó para el arrastre de una estocada trasera y tendida atacando con el brazo suelto. El cuarto toro con mal estilo se lo quitó de delante con brevedad de un pinchazo y una estocada trasera y desprendida atacando con el brazo suelto yéndose de la suerte y hubo división de opiniones.
José María Manzanares tuvo con el capote y la muleta detalles de su clase torera. Al segundo de la tarde lo dejó para el arrastre de pinchazo y estocada. Saludando desde el tercio con división de opiniones. Al quinto se lo quitó de delante de un pinchazo y una estocada.
Y con Miguel Ángel Perera a hombros por la Puerta de Madrid finalizó el festejo del que se esperaba más aunque lo del último torero extremeño fue suficiente. Vayamos no haciendo caso de los ecos publicitarios de toros y toreros que tanto nos cuentan.
Madrid 24 de mayo 2014. Feria de san Isidro.15º festejo
Diego Ventura tuvo una destacada actuación. Toros de Terrón mansos y deslucidos.
Con tres cuartos de entrada se corrieron toros de Luis Terrón desigual de hechuras, manso, deslucido y sin clase. Algunos acusaron peligro. Los más destacados fueron los corridos en primer y sexto lugar.
Andy Cartagena hubo de exponer demasiado la cabalgadura y tras un rejón trasero acabó con el astado y fue premiado con oreja. En el cuarto hizo una buena actuación haciéndose con el toro al que despachó de un rejón tendido y descabello.
Diego Ventura tuvo una gran actuación templando la embestida del toro tanto en los medios como en los adentros. Destacó clavando banderillas y rejones y a su primero segundo de la tarde lo dejó para el arrastre de un rejón contrario con petición de oreja. Al quinto lo llevó muy toreado y con el rejón de muerte tras un pinchazo y un rejón trasero dobló el toro saludando desde el tercio tras petición de oreja.
Luis Valdenebro estuvo torero con su primero tercero de la tarde, como el toro ofrecía poco lo despachó de dos pinchazos y hubo silencio. En el sexto colocó banderillas y rejones y con el de muerte dejó un rejonazo corto y contrario y pie a tierra lo descabelló, escuchó palmas.
Mientras en Lisboa tenía lugar la final de la UEFA Champions League que enfrentaba al Real Madrid y al Atlético de Madrid.
Madrid 25 de mayo 2014. Feria de san Isidro. 16º festejo
Desastre ganadero de la divisa Peñajara, cinco toros al corral por flojedad de remos. Quinto y sexto dieron un juego aceptable.
En una tarde sorprendente y con tres cuartos de entrada Víctor Puerto, Eugenio de Mora y Alberto Lamelas salieron a la plaza dispuestos a dejar ver su torería y se encontraron con un material bovino despreciable. El público cubrió tres cuartos del aforo y se las prometía ver esperando buen toreo pero se lo impidieron los toros de la ganadería extremeña de Peñajara por su flojedad con repetidas caídas aunque este hierro tiene origen acreditado procedente de la ganadería de Baltasar Ibán. Así salieron once sobreros, algo llamativo a lo que no estamos acostumbrados. El prestigioso cabestrero Florito tuvo repetidas actuaciones cada vez a retirar un toro con su magistral dominio para acorralar y retirar para dentro a los toros desechados.
Víctor Puerto, Eugenio de Mora y Alberto Lamelas tuvieron que pechar con las deficientes condiciones de los toros titulares y los sobreros.
Victor Puerto vio como el primero volvía al corral y salía un sobrero topón que entraba al caballo y se salía suelto con un pitón roto. En el otro sobrero que salió blando y sin nada que ofrecer lo trasteó y mató de una estocada. Al cuarto justo de fuerza que se vencía por los dos lados lo trasteó y lo despachó de media perpendicular.
Eugenio de Mora, el primero de su lote volvió al corral y con el sobrero buenas verónicas aunque el toro se doblaba de manos en los primeros muletazos. No tenía fuerza y lo despachó de pinchazo entrando con el brazo suelto, otro pinchazo y estocada. El quinto, un toro bravo hizo un toreo muy completo con capote y muleta y al completar con la espada fue premiado con oreja.
Alberto Lamelas con el tercero blandeó de manos y volvió al corral. Con el sobrero lidiado en tercer lugar logra una buena pelea con el caballo pero flojea de remos y es desechado al corral. Sale otro sobrero y después de cumplir en varas y en banderillas y al muletearlo en los primeros pases se acuesta. Ya levantado va a la muleta y el diestro resulta cogido por suerte sin consecuencias. Suena un aviso y lo despacha de un pinchazo y media estocada. El sexto un toro de mal juego con el que el diestro cumplió despachándolo con prontitud.
La afición abandonó la plaza decepcionada por la catástrofe ganadera.
