REPORTAJES GRÁFICOS TAURINOS…
Y TEMAS VARIOS DE LA CÓRDOBA DIVERSA…

BODA DE “DORA LA CORDOBESITA”, CON EL TORERO

MANUEL JIMÉNEZ MORENO “CHICUELO”(AÑO 1927) 

La unión matrimonial se celebró en Córdoba, el 10 de Noviembre de 1927, en la iglesia de los Dolores, ante un seleccionado conjunto de amigos y la asistencia de muchos cordobeses, que entendieron que no debían perderse tan sonado romance, aunque sólo fuera desde la plaza en la que se concentraron, para observar lo más cerca posible, la llegada de los novios y de los invitados. Celebraron de forma especial y cariñosamente, la llegada de la cordobesa Dora y del torero sevillano “Chicuelo”, que fueron aclamados y piropeados. La prensa reflejaba así el evento:


…”Esta tarde, a las cuatro y media, se ha celebrado en la iglesia de los Dolores, y ante el cura párroco de San Nicolás, don Paulino Seco de Herrera, la boda de nuestra gentilísima paisana: Dolores Castro Ruiz (Dora la cordobesita) y el popular matador de toros, Manuel Jiménez Moreno “Chicuelo”…

Y este, el documento oficial de la boda:

..”.Paulino Seco de Herrera, cura de la Parroquia de San Nicolás, en la iglesia de Nuestra Señora de los Dolores, casó a MANUEL JIMÉNEZ MORENO, de estado soltero, de 25 años, natural de Sevilla y vecino , hijo natural de Manuel Jiménez Vera y de Dolores Moreno Pérez, y MARÍA DE LOS DOLORES CASTRO RUIZ, soltera de 26 años, vecina de esta ciudad, en la plaza del Ángel, hija natural de José Castro Aguilar y Carmen Ruiz Martínez.”

Apadrinaron a los contrayentes: don Antonio Cabrera Díaz, empresario del teatro Duque de Rivas y doña Dolores Moreno, madre del novio. De testigos, habrá que consignar los que figuran oficialmente: Ángel García Córdoba y Dionisio López Castro, y los que se citaban en los medios periodísticos: Luis de las Morenas, Ángel García Monasterio, Bonifacio Mora y Antonio Román Manfredi.

…” en la linda casita de la plaza del Ángel, se sirvió a los invitados un espléndido lunch, haciendo los honores de la casa el señor Cabrera, los novios, doña dolores Moreno y la prima de “Chicuelo” Gertrudis”…

…”Durante el lunch, que fue estupendamente servido, por la repostería de Mirita, interpretó, escogidas canciones, la orquesta del Teatro Duque de Rivas, dirigida por el maestro Bonifacio Mora.”..

“Chicuelo” fue un matador de toros, trianero por más señas, muy importante en las páginas taurinas. Su calidad y genialidad, le hicieron acreedor a justas consideraciones de los periodistas del momento.

Manuel Jiménez, nació en Sevilla el 15 de Abril de 1902, hijo de torero y sobrino del banderillero “Zocato”, quien le guió en sus primeros pasos, al quedar “Chicuelo” desde muy joven huérfano. Con tan sólo diez años mata el primer becerro, aprende los secretos del toreo en la escuela taurina de Sevilla, hasta su presentación con traje de luces en la temporada de 1917. El 28 de septiembre de 1919, toma la alternativa de manos de Juan Belmonte, que le cedió un ejemplar de Santa Coloma, llamado “Vidriero”.

 

Dora la Cordobesita

 Confirma el doctorado el 18 de Junio de 1920, siendo Rafael “El Gallo” el padrino, que le cede el toro “Volandero” de Veragua. Como curiosidad y coincidencia con las fechas que nos ocupan, cabe recordar que la temporada del 27 alternó en veintisiete festejos y no aceptó ir a México por enfermedad, quedándose en Sevilla junto a Dora, con la que acababa de contraer nupcias. La siguiente temporada, no se la planteó “Chicuelo” como para intervenir en muchas corridas, pero le hizo una sensacional faena al toro “Corchaíto” de Graciliano Pérez Tabernero, que le encumbró de nuevo, finalizando ese año con ochenta y una actuaciones, a pesar de haber sufrido dos cornadas graves, una en Barcelona y otra en Málaga.

 

Torea por última vez, como profesional, el día 1º de Noviembre de 1951, ejerciendo de padrino de dos nuevos matadores de toros: Juan Doblado y Juan de Dios Pareja Obregón. Con esta breve pincelada entramos, también de forma comprimida, en lo más indicativo de la vida artística de “Dora la cordobesita”:

Dolores Castro, representó en la copla un valor importante, que se refleja en la gran cantidad de semblanzas que pueblan las notas de la cultura andaluza. Fue una artista, especialmente querida por el público, que admiraba su excepcional arte y gracia, cuando bailaba pasodobles en el escenario o entonaba cuplés aflamencados, auténticas creaciones, que eran aplaudidas con fuerza. Nació el 5 de Mayo de 1901 y fue bautizada en la iglesia de Santiago.

Muy joven, desde que contaba doce años, intervenía en espectáculos dedicados a la copla, protegida y asesorada por el conocido empresario cordobés: Antonio Cabrera, importante productor y propietario del teatro Duque de Rivas. De la mano de tan influyente representante, debutó Dolores en Madrid, concretamente en el teatro Romea. Al día siguiente, Antonio Cabrera, concertó una cita con Julio Romero de Torres, y le presentó a la paisana, quedando el pintor encantado y prendado, de la gracia y dulzura que destilaba la bella Dora.

Fruto de esta amistad, fue el primer retrato que le hizo, posando con sombrero cordobés y de fondo la campiña cordobesa; también figuró como base ilustrada, del cartel correspondiente a la corrida celebrada en Madrid, homenaje a la Cruz Roja y asimismo, intervino como modelo, en el proyecto de cartel de la corrida de beneficencia de Alcalá de Henares.

La sobresaliente intérprete de la canción y en concreto del cuplé, que fue Dolores Castro, dejó de pisar los escenarios al casarse con el diestro, situación que se daba con frecuencia en esa época, en la que, la figura del marido influía bastante en semejantes decisiones.. Los seguidores, digamos que fueron los más perjudicados, porque dejaron de disfrutar con las actuaciones de la genial “Dora la cordobesita”, algo así como que “sufrieron” su boda…

Dolores falleció en el año 1965 y “Chicuelo” en el 67, ambos en Sevilla, y ambos dejando un reguero de i9nspiración y empaque, dignos de la mejor historia del arte. . 

 

FRANCISCO BRAVO ANTIBÓN