En días pasados se cumplió el 25 aniversario de la triunfal alternativa del diestro Álvaro Amores, en Castellón de la Plana, en la corrida de beneficencia del año 1986, de manos de Francisco Ruiz Miguel (Escalera del Éxito 169), con Lucio Sandín de testigo, que le cedió el toro “Escandaloso”, nº 41, de 460 kilos, al que cortó las dos orejas, de la ganadería de Joaquín Barral, lo que le permitió salir a hombros por la Puerta Grande.

 

Álvaro Amores Rodríguez, nació en la localidad gaditana de Barbate, el 17 de marzo de 1963, en el seno de una familia dedicada a la pesca, su padre y su hermano excelentes patrones de barco, se trasladó desde muy pequeño, a los tres años, a Guinea Ecuatorial, con sus progenitores y, desde allí, a los seis años, a Castellón, donde se crió, en El Grao, el puerto pesquero, le entró la afición por la fiesta y reside desde entonces, por lo que es considerado torero de esta tierra levantina, donde comenzó su afición y vistió el primer traje de luces, en la misma capital de La Plana, el 27 de marzo de 1981, para estoquear un eral de la ganadería de Ruiz Miguel, que luego seria su padrino de alternativa, en esta misma plaza, de la que ha salido a hombros por la Puerta Grande, hasta ocho veces.

 

En el año 1988 logró todos los premios al triunfador de la temporada en la Monumental de Barcelona, mejor faena y dos cómo autor de la mejor estocada.

 

 La última vez que vistió de luces en Castellón, fue el 18 de marzo de 1989, alternando con José Luis Parada y Tomás Campuzano, con salida a hombros, tras cortar dos orejas, una en cada toro, del hierro de Benítez Cubero.

 

El 11 de Julio de 1996 confirmó su alternativa en Madrid, de manos de Pedro Castillo, con Miguel Rodríguez, de testigo. Toros de Juan Luis Fraile.

 

Y se retiró del toreo en su Barbate natal, en corrida de toros, el 19 de julio de 2003.

 

Su maestro y a quien admira profundamente, el tristemente desaparecido Francisco Rivera “Paquirri” le apadrinó durante cinco años, y le acogió en su finca “Cantora”, llevándole a todos los tentaderos de Andalucía. Y en su última época le apoderó el diestro José Luis Galloso.

 

El pasado mes de marzo cumplió 48 años de edad. En la actualidad se dedica al cuidado de su familia, su mujer Elena y su hijo Álvaro, de dos años, al campo, con su pequeña finca a las afueras de Val D´Alba, Castellón, y a los negocios. Una de sus ilusiones sería dirigir la Escuela Taurina de Castellón.