GRA255. CALASPARRA, (MURCIA), 06/09/2015.- El novillero venezolano Manolo Vanegas ha salido a hombros hoy tras cortar una oreja a cada uno de sus novillos, durante la cuarta novillada de la Feria de la "Espiga de Oro", celebrada hoy en la plaza de toros de Calasparra, lidiando reses de Prieto de la Cal.EFE/Marcial Guillén.

Informa desde Venezuela. Rubén Darío Villafraz. Periodista Taurino

La temporada taurina americana está llegando al final de su curso, con la culminación de campañas de vital importancia por arenas peruanas, ecuatorianas, colombianas, y venezolanas, como es el caso de Mérida, el cual junto con Maracay, colocan el epilogo al paso de relevantes citas del calendario, el cual cada vez son menos, producto de las circunstancias que vivimos.

De todo esto sacamos de positivo que en arenas allende, un torero de origen humilde, como es el caso de Manolo Vanegas, se haya presentado como novillero este pasado domingo en México, y más que rotundo haya sido su estreno. Una puerta que podría abrirse cuando este joven espada tome la borla de matador de toros, Dios mediante, en junio ante toros de Alcurrucén en suelo galo.

Lo de este domingo viene ser la reafirmación del porqué fue el líder del escalafón menor en Europa el año pasado. Lo hizo frente a reses del hierro de San Salvador en la localidad yucateca de Peto, cortando tres orejas, con posterior salida en hombros, al lado, mano a mano, del espada de la tierra, André Lagravere «El Galo», quien cortaría una oreja.

Sirve todo esto de estímulo para confiar que este 2017 será un año muy especial para la fiesta brava venezolana, al contar con toreros de esta talla en un momento tan difícil como este, donde falta identidad por nuestros toreros, los únicos junto con nuestras ganaderías que pueden salvar del acabose todo esto por la cual deben defender, dentro y fuera del ruedo.

JOSÉ ANTONIO SALAS A PUNTO PARA ESTE JUEVES

Se abre el telón ferial emeritense este jueves, y lo hace con la ya tradicional novillada de oportunidad que marca el prólogo a la cita ferial que este año arriba a su 48ª edición, del también llamado “Carnaval Taurino de América”. Y de este festejo, sobresale el nombre del joven espada de Sabaneta-Barinas, pero afincado en Mérida como su tierra de proyección taurina, me refiero al novillero José Antonio Salas, uno de los novilleros merideños de mayor cartel en los actuales momentos.

Viene Salas saboreado el momento más dulce de su aún corta carrera, más tras su brillante triunfo el pasado 26 de enero en el ruedo de Pueblo Nuevo, donde saldría en hombros tras brillante actuación con el indulto de un ejemplar de Hugo Domingo Molina. Para ello se ha estado preparando a tope (tentaderos en Rubio, El Vigía, Carora, Carache), con el propósito de alcanzar nuevamente destacada presentación ante sus incondicionales, en una arena donde se le espera con ilusión.

El panorama pinta interesante para José Antonio Salas, quien ya le proyectan tras estos éxitos pisar seriamente tierras españolas para proseguir su andanza como futuro torero de cartel en nuestras plazas nacionales.