Hemos querido recordar tan sabia frase cuando observo una fotografía tomada hace más de 55 años en la ciudad de Medellín.

 

Fue tomada en las horas de la mañana del día 21 de abril de 1946 en el lobby del Hotel Nutibara y en ella aparecen los tres matadores que integraron el cartel de la corrida que se celebró en las horas de la tarde en el coso taurino de esta ciudad colombiana: Gitanillo de Triana, Manuel Rodríguez «Manolete» y Carlos Arruza.

 

Da gusto de verdad mirar esta fotografía y contemplar la elegancia de los tres toreros impecablemente vestidos: trajes de alpaca cruzado o sencillo, camisa de cuello almidonado, corbatas de seda y zapatos a la última moda — que entre otras cosas muy poco ha cambiado en 50 años en el buen vestir masculino- ¡Qué elegancia y que porte!

 

Así eran los toreros de antes, bien vestidos en el ruedo y en la calle. Sabían comportarse con elegancia en los más exigentes ambientes de la sociedad y por ello eran siempre invitados permanente de las celebridades, en el campo artístico, político, social o gubernativo. Solo basta recordar las amistades de Juan Belmonte con todos los literatos de la generación del 27, o el círculo de amistades de Luis Miguel Dominguin en Hollywood.

 

Hace poco vi en la televisión una entrevista con dos jóvenes matadores y que pena sentí que no parecieran toreros. Se presentaron en chándal o sudaderas y con zapatos tenis, lo que les daba la clásica apariencia de un atleta o un futbolista, listos para el entrenamiento.

 

Y es que con las lógicas y necesarias excepciones, así se visten la mayoría de los toreros actuales cuando no lo están de luces en el ruedo. No parecen toreros en la calle. Qué equivocación!

 

Toda la vida el torero ha sido una persona de rumbo. Le ha gustado siempre lo mejor: vestir bien, vivir bien, comer bien, y pasarlo bien. Por eso no se equivocó Juan Belmonte, ni quienes han sabido hacer caso a sus palabras: «… el buen torero no es solo serlo, sino parecerlo «.

 

 

Alberto Lopera “Loperita”

Matador de toros

Periodista taurino

Escalera del Éxito 43