De familia
Milagros Sánchez Lazarte se convertirá en la segunda torera peruana que actúa en la tradicional plaza rimense. Hace 32 años lo hizo María Dolores Velásquez, entonces de 22 años, quien se presentaba como Lola de España.
Descendiente de una familia de aficionados al toreo, vivió en los Barrios Altos y luego en el Callao. Confesó que sus padres vieron siempre con buenos ojos su deseo de ser torera. Sus dos hermanos varones prefieren estar de espectadores en las corridas.
Un empresario español a quien ella envió el récord logrado en Cajamarca, la invitó a presentarse y cuenta que no dudó en viajar a la madre tierra. En España logró un atractivo recorrido: un total de 27 en novilladas y festivales, logrando sumar 30 orejas y más de 10 rabos en tres temporadas.
Desde México
En tanto, Lulú de la Vega Tinajero es natural de la ciudad mexicana Querétaro. Recordó que bastó una invitación a una corrida y terminó toreando un becerro. Nunca sentí tantas emociones lindas, responde con emoción.
Así logré que me dieron la oportunidad de ingresar a la escuela de toreo y ahora estoy aquí lista para una corrida en el extranjero, en el Perú, manifestó.
Ella debutó a los 15 años y no entró en el campo por afición familiar. Su hermano es anti-taurino. Nos llevamos muy bien, pero el tema del toreo no está en nuestra agenda de conversaciones, comentó a manera de anécdota.
Ambas jóvenes toreras confiesan que estudian una carrera profesional, ‘ya que el toreo no es para toda la vida’. Milagros estudia administración hotelera y Lulú, quien se encuentra en la preparatoria para postular a una universidad, quisiera ser fotógrafa profesional.
Desde Lima, informa Alfonso Carrera