Dentro de la comedia del arte, es todo un personaje burlesco de las farsas, algunos definen al polichinela como un astuto elemento que no se separaba de su garrote para darle una paliza a quien no pensara como él y trayéndolo a colación en quienes rodean, viven y conviven malsanamente en el mundo del toro, pues hay unos cuántos de estos personajes dignos de toda una pésima comedia teatral.

 

Muy cierto. En la Fiesta Brava, la Fiesta de Los Toros, hay unos cuantos personajes de comedia teatral barata, polichinelas, los propios comediantes burlescos de las farsas, para hacerse de lo suyo en lo del toro, dándose aires de lo que nunca han tenido en buena ley pues han usado la careta de la farsa y cuando se lesionan o no se complacen sus intereses particulares taurinos, la caen a paliza a quienes se oponen a su forma de pensar o de actuar.

 

Polichinelas tiene nuestra Fiesta Brava, más falsos que la careta que esgrimen para lograr sus indignos propósitos apoyados por serviles de oficio, no tienen dignidad  ni personalidad propia y «al que le caiga el guante, que se lo plante» y bien plantado porque hay comedias de comedias, malas, mediocres e infinidad de figurones teatrales, que caerán derrumbados por su propio peso.