Junto a las Arènes Parisiennes ubicada en el Quai de Nueva York y destinada a las corridas landesas, la capital francesa contó con dos plazas de toros con ocasión de la Exposición Universal de 1889. La “Plaza de la Exposición”, de madera, con palcos, levantada en el Campo de Marte, fue inauguarada por Antonio Carmona el Gordito, Fernando Gómez el Gallo y Juan Ruiz Lagartija. La plaza desapareció aquel mismo año y contó con la asistencia de la ex-reina de España, Isabel II.

 

RUE PERGOLESE

 

Poco después fue anunciada la construcción de una gran plaza en la rue Pergolese, junto al Bosque de Bolonia. Ganaderos y empresarios españoles financiaron los tres millones de francos que costó, con el apoyo también de la Embajada española. La plaza tenía 800 metros cuadrados, construida en ladrillo y viguería de hierro, sobre sólidos cimientos de piedra. Tenía 116 palcos. Y una capacidad para 22.000 personas. La corrida inaugural fue de Veragua y La Patilla, y fue lidiada por Currito, Felipe García, Angel Pastor y Paco Frascuelo. En esta plaza lidiaron también figuras como Lagartijo, Frascuelo, Mazzantini, CaraAncha, Guerrita… El 6 de noviembre de 1892, sin embargo, la plaza cierra sus puertas, la empresa se declaró en quiebra al año siguiente, y la plaza fue demolida.