Christian Tobar, dejo una buena impresión ante el respetable. En el primero, un manso de Albaserrada, que de inicio solo se fue por los cabezazos y le supo brindar una luxación en su dedo anular, que tuvo que ser atendido en ese instante, pésimo después, que no toco más que matarlo, en el segundo Christian lo recibió muy bien y lo toreó con mucho temple, dando tandas ligadas por los dos pitones y una muy buena impresión de este novillero recién llegado de Cali, lástima que pinchó y se le fueron los trofeos.
Nicolás Montufar, tuvo un buen novillo de Mirafuente, al que el de Sangolqui le supo aprovechar cada embestida y saberla transmitir al tendido. En la muleta dio buenas tandas por el derecho y se acomodó mucho a lo que tenía en frente. Mató bien y toco pelo. En su segundo, el Albaserrada, no le permitió comunicarse con el tendido, que no le permitió reivindicar lo conseguido en el primero. Enhorabuena por Montufar.
El novillero de la escuela de Cali, Guillermo Cevallos, estuvo bien en el primero al recibirlo por buenas verónicas y ligando en la muleta con lo que se lo premio con la vuelta al ruedo. En el segundo, no se acomodó a lo que tenía enfrente y no tuvo otra que pasaportarlo, cayendo en la desesperación, y así lo quiso matar al apuro en su primer intento que brindó un gran susto.
Desde Quito, informa Santiago García