FESTEJO CON FINAL TORERO A CARGO DEL SEVILLANO NAZARÉ QUE MERECIÓ UNA OREJA QUE NO SE CONCEDIÓ

Curro Díaz, Morenito de Aranda y Antonio Nazaré, trío de espadas, cabecera del cartel que dieron cuenta de los toros de Salvador Gavira, que fueron nobles, justos de casta, fuerza y bravura. El sexto un buen toro, segundo del lote de Antonio Nazaré, el torero sevillano de Dos Hermanas, que logró una gran faena con temple y ligazón en pases con clase en su ejecución y remató de un estaconazo. Hubo petición de oreja que incomprensiblemente no se concedió. Pero el toreo realizado, ¡ahí quedó!

El ambiente en los festejos taurinos en Madrid esta temporada lo encontramos raro. Un público de aficionados esquivos o raros ante lo realizado con calidad no se les escapa ni un ¡olé! En cuanto a lo realizado sin enjundia torera lo aceptan con indiferencia sin protestar y la plaza en todos los festejos hasta ahora sólo ha alcanzado como máximo un cuarto de entrada. En todos los festejos desde que se inició la temporada, con precios prudentes y facilidades para adquirir localidades. Hay que encontrar una solución a ese problema entre aficionados, empresarios, ganaderos y toreros para encontrar una entente general. Todos decididos a que la fiesta lo que ha representado vuelva a ser lo mismo. La plaza de Madrid ha tenido una categoría máxima y el orbe taurino y nuestra fiesta nacional tiene un reconocimiento de hecho cultural mundial que la Unesco está dispuesto a consagrar.

Retornamos a los otros diestros del cartel Curro Díaz y Morenito de Aranda para decidir su actuación. No se les puede negar voluntad e intenciones de torear, pero sus toros no ofrecieron ocasiones y ellos quedaron en una postura que definiríamos para salir del paso.

Concretado lo que fue en general esta corrida de Pascua y su circunstancia, ponemos punto final.

 

 
MONUMENTAL DE LAS VENTAS 13 DE ABRIL DE 2014
CORRIDA DE LARGA DURACIÓN, TRES HORAS POR FALLO A ESPADAS CON SIETE AVISOS
SE REGISTRÓ UN CUARTO DE ENTRADA
DOS TOROS FUERON DEVUELTOS AL CORRAL, UNO AL SONAR LOS TRES AVISOS Y OTRO POR FLOJEADA DE FUERZAS
COGIDA GRAVE DEL MALAGUEÑO JIMÉNEZ FORTÉS
El aficionado madrileño sigue reacio para acudir a los festejos taurinos, en la corrida del Domingo de Ramos sólo llenó la plaza un cuarto del aforo escaso. La situación hace que pensar.
En esta ocasión se han corrido toros del Puerto de San Lorenzo, encaste Atanasio Fernández y Lisardo Sánchez. Bien presentados cumplieron en varas y embistieron con nobleza, no lucieron más por culpa manifiesta de fuerza. El tercero fue devuelto al corral falto de fuerza.
El malagueño Jiménez Fortes se encontró con el primero, noble y de buena embestida, pero justo de fuerza. Puso voluntad ante la pastueña embestida del toro, con voluntad lo intentó pero el muleteo no alcanzó el lucimiento. La faena de larga duración, de pases sin relumbrón, la remató de una estocada y sonó un aviso. El cuarto, justo de fuerza, lo toreó fuera de cacho y citando con el pico de la muleta, el pase de pecho lo remató sacando la muleta por los costillares y acabó de dos pinchazos y una estocada, sonando un aviso. Al realizar un quite al sexto, resultó cogido grave.
David Galván, gaditano de San Fernando, se encontró con el segundo, que se dejaba torear. Faena larga deslavazada sin llegar al público, sonó un aviso y atacó con la espalda cobrando un pinchazo, estocada yéndose de la suerte, segundo aviso y sin acertar con el descabello, sonó el tercer aviso y los cabestros de Florito se lo llevaron al corral con la pericia habitual.
El quinto toro noble se dejaba torear, faena aceptable de larga duración, sin medir el tiempo, sonó un aviso y acabó de dos pinchazos y estocada.

 

López Simón, torero madrileño del barrio de Barajas, se dejó ver en varios detalles toreros. El tercero, primero de su lote, por flojedad manifiesta de fuerzas, fue devuelto al corral. Y se lidió el sobrero de la ganadería “La ventana del Puerto”, con el mismo encaste que la ganadería anunciada. De bonita lámina, se dobló de manos ante los capotes y en la pelea en varas. Tras largas series muleteriles, acabó de una estocada y sonó un aviso. Hubo petición de oreja y dio vuelta al ruedo. El sexto, con la fuerza justa, cogió de gravedad al hacer un quite a Jiménez Fortés. Al comenzar la faena muleteril, el toro se dobla de manos. El largo muleteo con derechazos y pases de pecho, pone buen son en los naturales que remató con el de pecho. Mató con brevedad y el festejo de larga duración acababa a las tres horas y tres cuartos de haberse iniciado. ¡Y ya está bien!
 
 
Decano de la Crítica Taurina
Periodista – Escritor
Escalera del Éxito 103