Termina el ciclo taurino de septiembre en Madrid y ya está a la vuelta la feria de otoño. En el largo festejo que nos ocupa se corrieron tres novillos de José María Escobar (1º,2º y 6º) y tres de Mauricio Soler Escobar (3º, 4º y 5º) de procedencia de Graciliano Pérez Tabernero, casta Santa Coloma que pastan en fincas de la provincia de Sevilla y de Málaga. Cumplieron en varas y dieron un juego deslucido.

Luis Gerpe vio cómo su primer novillo volvía al corral por falta de fuerza y repetidas caídas. Se corrió turno y salió el que iba a lidiarse en cuarto lugar, novillo con malas intenciones, se iba al bulto. No hubo nada que hacer por el peligro que desarrollaba en la embestida. Desistió de un toreo doblándose con él y se lo quito de delante de pinchazo, estocada y descabello. Escuchó palmas. En cuarto lugar salió el sobrero de Benjamín Gómez Martín acusando fuerza. En el quite por verónicas trompicó al diestro sin más consecuencias. La embestida fuerte resto temple a los naturales. Tras unas manoletinas recetó media estocada, sonó un aviso y acabó de cuatro descabellos.

Roberto Blanco ante el segundo novillo que embestía con genio a la muleta y se vencía por ambos lados colándose y cogiéndole dos veces por el pitón derecho. Debió doblarse de modo defensivo pero se decidió a intentar no torear.  Lo despenó de media estocada, pinchazo hondo ladeado y dos descabellos. El quinto se dejo torear le cogió aparatosamente por suerte sin consecuencias graves. Puso voluntad en el muleteo y se lo quitó de delante de dos pinchazos, aviso, otros dos pinchazos, media estocada y sonó el segundo aviso.

Daniel Crespo hizo su presentación en Madrid, torero de buen estilo artístico tuvo en el tercero un novillo con casta venciéndose por los dos pitones, en cada pase se veía obligado a enmendarse y perdió la muleta en uno de estos. No había posibilidad de quedarse quieto. Acabo de un pinchazo hondo y estocada. El sexto se calló aparatosamente tras la suerte de varas. El sexto bis salió corretón y le propinó verónicas con buen estilo, cumplió en varas y se dejó torear. De la faena destacó una serie de naturales y acabó de una estocada. Arrastrado el novillo dio vuelta al ruedo.

Novillada de larga duración, comenzó a las 6:30 y terminó pasadas las 9 de la noche, de entrada la acostumbrada todo septiembre de un cuarto de plaza. Esperamos que en la feria de otoño veamos más aficionados en el tendido y por favor que traigan a los niños. Hay que hacer afición.

 

José Julio García

Decano de la Crítica Taurina

Periodista – Escritor 

Escalera del Éxito 103