La nueva generación de la Cantera Taurina Venezolana, en los inicios de su trayectoria profesional, se enfrenta a una de las tantas realidades, como lo es, el contar con un excelente Apoderado, que sepa llevar sus intereses, para lograr que los Empresarios Taurinos, les den la oportunidad de darse a conocer, en una Feria Patronal Taurina de Venezuela.

No se la tienen fácil, los nuevos matadores de toros  venezolanos, si no cuentan con el apoyo, asesoramiento de un buen Apoderado, que de lógica, debe ser de su entera confianza, sepa manejar acertadamente sus intereses profesionales, lo de las contrataciones, acuerdos con los Empresarios Taurinos y algunos por allí, aunque no lo crean, están a punto de colgarse un cartelito alrededor del cuello, con el escrito se busca Apoderado.       

Los Apoderados de los matadores de toros en Venezuela, o son sus padres, o son sus amigos de confianza, o son sus compadres, o familiares cercanos, otros ni lo tienen aún y fungen de toreros y apoderados al mismo tiempo. En todo este devenir, se la tienen que jugar, valerse de amigos con palanca y del compadrazgo hasta político y así, llamar la atención de los Empresarios, para lograr cupo en un cartel taurino ferial, un justo honorario profesional, algunas veces mancillado, por aquellos que aceptan uno mísero, con tal de lograr un contrato de actuación, menospreciando la profesión, sin olvidar, el juego sucio o la mala sombra, que les hacen algunos del entorno profesional taurino.

Me comentaba un aficionado cuando se refería a las penurias que pasan los nuevos matadores de toros en Venezuela, que no tienen Apoderado, no logran un cupo en cualquier Feria Taurina Venezolana lo siguiente: hay unos que fungen de Apoderados, que de ello, nada tienen, son más comerciantes que Apoderados, manejan a su antojo a su representado, ganan hasta más que ellos, aparte de que le truncan el paso a los demás, con tal de poner a su torero.

En honor a la verdad, con esto de los Apoderados de toreros en Venezuela, es difícil definir, hoy por hoy, quienes son buenos o malos. Espero quienes funjan como tales, no se ofendan y por sí acaso, así fuese, ni modo, al que le caiga el guante que se lo plante.

Lo de del Apoderado, es otra piedra en lo del toro, que deben saber sopesar, quienes conforman, la nueva generación de la Cantera Taurina Venezolana.