El festejo comenzó con veinte minutos de retraso y durante la lidia del primer toro aún seguía la gente entrando a la plaza. Las colas tanto para conseguir las entradas y el acceso a la plaza, provocaron este retraso. Durante la faena de muleta del tercer novillo, cayó un importante chaparrón creando un gran revuelo en el tendido.

Se han lidiado novillos de la ganadería de Hnos. Garzón, en general bien presentados, el primero de menor transmisión, el segundo con nobleza y buen juego, y en líneas generales aquejados de poca fuerza.

Alberto Lamelas, se mostró muy entregado toda la tarde, con muchas ganas de agradar y dando todo lo que tenía. Comenzó templado con el capote, y colocando tres pares de banderillas muy buenos, reunidos y cuadrando en la cara. La escasa fuerza de su primer toro, le impidió que pudiera bajar más la mano con la muleta. Pese a ello, consiguió enjaretar dos buenas tandas bien ligadas, con la mano derecha. Por el pitón izquierdo, sólo pudo darle los muletazos de uno en uno, y finalmente ligando una buena serie reponiéndose a las pausas y miradas del novillo. En su segundo novillo, entregó el resto, he hizo las delicias del público en un quite por gaoneras muy ceñidas y con las banderillas, sobre todo con las cortas, en un par de rodillas, desde las tablas. Labor inteligente la planteada a este segundo oponente, comenzando con pase cambiado por la espalda y consiguiendo superar el peligro que tenía en el pitón derecho, y cuajando una gran faena con ambas manos.

José Carlos Venegas, se mostró templado con el capote, y aprovecho las buenas condiciones de su primer oponente, el cual a pesar de su escasa fuerza tuvo nobleza. Consiguió lograr un gran trasteo por ambos pitones, destacando especialmente una buena tanda con la mano derecha y una con profundidad sobre la mano izquierda. Acortó las distancias y ahí consiguió poner la emoción y llegar a los tendidos. Su segundo novillo, llegó a la muleta con querencia a las tablas y tras los estatuarios iniciales, ya marcó cuáles serían sus terrenos. Venegas consiguió exprimir a su oponente, logrando ligar algunos muletazos, sin dejarle irse a tablas.

El novillero murciano, Raúl Sáez, dejó buena impronta en La Puerta de Segura, y pese a estar menos placeado que los otros dos novilleros, no se dejó ganar la pelea y les plantó cara, dejando su sello personal en la plaza. En su primer novillo, toreo con gusto con el capote, y brindó su labor a sus compañeros de cartel. Lástima que la lluvia hiciera que la gente no prestara atención a lo que sucedía en el ruedo, donde este joven novillero, estaba plasmando muletazos de buen gusto y hondura. Culminó su labor con ajustadas manoletinas. En el último novillo de la tarde, logró un buen trasteo, por ambos pitones, destacando sobre todo, algunos pasajes con la mano izquierda consiguiendo naturales de gran belleza. Y otra vez más el público se lo perdió, esta vez, porque se encontraban afanosos, por salir de la plaza.

 

 

Ficha del festejo:

 

En La Puerta de Segura (Jaén) con la plaza llena, se han lidiado novillos de la ganadería de Hnos. Garzón, bien presentados y de juego desigual, mejor el segundo con transmisión y nobleza, y en líneas generales aquejados de poca fuerza.

 

Alberto Lamelas, de blanco y plata: pinchazo (oreja); estocada (dos orejas y rabo).

José Carlos Venegas, de blanco y azabache: estocada (dos orejas y rabo); pinchazo y estocada (oreja).

Raúl Saéz, de grana y oro: estocada y tres descabellos (dos orejas); pinchazo, media estocada y dos descabellos (oreja).

 

 

Desde La Puerta de Segura, informa Marisa Fernández