El rejoneador Manuel Lupi, por más que intentara encelar al toro que le tocó, no pudo alcanzar gran lucimiento, sin embargo dejó claras sus ganas de agradar al público.

 

Antes de que saliera el segundo de la tarde, primero en lidia de a pie, Víctor Mendes recibió una gran ovación. El diestro portugués entendió muy bien al de Palha, al que llevó por chicuelinas al caballo. Pero el comportamiento de salida del burel no cambió durante mucho tiempo, sólo se dejó en el primer par de banderillas, en los otros dos puso en más de un apuro a Mendes y a Padilla, que compartieron tercio. El Palha no quería pelea en la muleta, desarrolló sentido y estaba más pendiente del torero que del engaño. Acabó el diestro luso de dos pinchazos y media que basta.

 

Juan José Padilla salió muy predispuesto al ruedo bilbaíno, y saludó a su primer ponente con una larga cambiada de rodillas. Con la muleta le instrumentó muy buenas tandas de derechazos y naturales, pero al no acertar con los aceros perdió los trofeos.

 

Rafaelillo acusó no estar placeado al no poder dominar al enemigo que sorteó, otros muchos que torean más tampoco hubieran podido.  El astado embestía muy rápido, y se le venía encima antes que se preparase para el pase, y lo desbordaba. El murciano, con muchas reservas, lo pasaportó de un bajonazo y tres descabellos.

 

Luis Bolívar se hizo muy bien a la condición de su toro, lo citó dándole la distancia y ejecutó los muletazos con hondura y profundidad. Demostró firmeza ante un toro al que había que poder, como el resto de sus hermanos de camada. El público de Bilbao no le perdonó sin embargo el bajonazo, por lo que el presidente hizo caso omiso a la petición de trofeo. Muy injusto que le protestaran cuando se disponía a dar la vuelta al ruedo.

 

Iván Fandiño apuntó atisbos de torero con cualidades, para muestra algunos muletazos de buena factura, pero al trasteo le faltó ligazón y consistencia para estar a la altura de una corrida de Palha en Bilbao.

 

 

 

 

Plaza de toros de Bilbao. 22 de mayo

 

 

 

Manuel Lupi: dos avisos y silencio

Víctor Mendes: palmas

Juan José Padilla: palmas tras un aviso

Rafaelillo: pitos

Luis Bolívar: petición de oreja y palmas

Ivan Fandiño: ovación