ABC /Sevilla
No es un escenario cualquiera ni una coyuntura habitual. ABC se citó el pasado martes con el actual empresario taurino del Coso de los Califas, José María Garzón (Madrid, 1973), en la Taberna San Cristóbal, uno de esos lugares de Córdoba que ha sabido conservar las recetas de la abuela, que ha cuidado a su clientela y que es un lugar de vocación y defensa taurina. El dueño, de manera anecdótica, cuenta que hay gente a la que «le incomoda» ver cuadros de toros cuando entra. Amablemente, se le responde que es una taberna cordobesa y que se mima al cliente. Es un lugar auténtico. El nuevo gestor de la plaza de toros ubicada en Ciudad Jardín quiere adentrarse plenamente en el sentir y el ser del cordobés. Una historia personal que prefiere no revelar y que hace alusión a su infancia fija el nombre de esta tierra en su mente con «un reto». Garzón es un tipo que piensa antes de responder. Concede pausa inicial al arranque de sus testimonio. Este sevillano nacido circunstancialmente en Madrid pisa la arena de la tierra de Manolete a sabiendas de la dificultad que plantea su empresa. Incomodidades a las que ahora se le suma un problema de causa mayor, el coronavirus. Garzón habla con aficionados antes de sentarse en la mesa del interrogatorio y acompañado por su gerente, Javier Lozano, asume el cuestionario con temple, respondiendo con contundencia pero adivinando una incertidumbre que no le debe mantener del todo tranquilo.
¿Cómo puede afectar la crisis del coronavirus al desarrollo de la feria taurina?
Sinceramente, no lo sé. Tengo mis dudas porque esto está cambiando cada minuto. Hay que esperar. Pero soy consciente de que sería una irresponsabilidad no hacer lo que recomiendan las autoridades. Ahora mismo, podría decirle que está todo en el aire; la feria taurina está en al aire a tenor de lo que nos digan.
«¿La afición de Córdoba? Estamos en el principio de sacar a ese enfermo en fase terminal de la UVI y recuperarlo»
¿Hay ya una fecha para presentar los carteles?
Los queríamos presentar el 26 de marzo, jueves por la tarde. A priori, teníamos proyectado un gran espectáculo, una gala de presentación, que era el propósito. Se iban a suceder actuaciones musicales y de otro tipo, desarrollar una performance… Estarían autoridades y personalidades venidas de otras provincias. Queríamos hacer algo totalmente diferente a lo que se ha hecho anteriormente. A día, de hoy, como le digo, esto no se contempla por circunstancias obvias.
¿Peligra en sí el desarrollo de la feria taurina?
Negarlo ahora con todo lo que está sucediendo sería mentir. Hay que esperar, ver qué sucede y contemplar si se pueden barajar otras fechas.
Me deja preguntarle por nombres de toreros…
No quiero dar ninguno, pero la gente puede estar segura de que en la feria de Córdoba estarán las principales figuras. Estaba rematando cosas, pero en general iba muy rematada. Sería una gran feria, muy equilibrada. Una apuesta muy fuerte para Córdoba, muy cara para el empresario. Quiero dejar claro que va a depender de los cordobeses que el proyecto pueda seguir para adelante. Porque todo esto vale mucho dinero, hay mucho gasto detrás. Quiero hacer cosas que nunca se han hecho.
¿Qué quiere decir?
Mi compromiso con Córdoba va a ser el que tengo firmado. Tengo un contrato por cinco años y los contratos están para cumplirse. Pero, en gran medida, el futuro de Córdoba lo van a decidir sus aficionados. El futuro será el que los cordobeses quieran que sea…
«Vengo aquí, porque es un reto personal con una plaza de primera. Tengo la obligación moral de apostar por Córdoba»
Le he preguntado por nombres, no me ha avanzado ninguno… Hablando de grandes figuras, entiendo que podría estar Roca Rey, el torero al que apodera, Paco Ureña, me vienen nombres como Morante, Manzanares, Aguado… ¿Me confirma alguno?
Prefiero no avanzar nada, la verdad. Me gustaría que se desvelara el día que vamos a presentar los carteles. Y de momento, eso no es algo que se puede confirmar.
  • Finito de Córdoba

En una comparencia ante los medios reflejó algunos de esos nombres, pero no habló de Finito. ¿Estará en la feria?

(Silencio). Ahora mismo, sólo puedo decir que estamos en negociaciones con él. Me gustaría dejar constancia de que a mí es un torero que me gusta mucho.
Garzón, durante un momento de la entrevista concedida a ABC – V. MERINO
En esa misma comparencia pública planteó un nuevo modelo de feria, ¿lo tiene cerrado?
Sí. Vamos a dar los toros en el primer fin de semana de la Feria de Nuestra Señora de la Salud, y no en el segundo. Me había planteado también sacar una corrida de toros al 9 de mayo, pero había mucho miedo por el tema del coronavirus. Evidentemente, es imposible. Lo que también tengo claro es que voy a dar una novillada fuera de feria. La fecha está aún por rematar. Vamos a subir un veinticinco por ciento el volumen de festejos. Si las cosas no funcionan este año, me plantearía otro modelo, incluso cambiar las fechas del ciclo.
«Esta plaza se tiene que llenar de cordobeses. En el toreo, Córdoba lo ha sido todo»
Desde que desembarcó en diciembre, ¿le ha dado tiempo a tomarle el pulso a Córdoba?
Un poco. He visto que la situación es que la gente ha perdido la ilusión por los toros, también por su feria. Creo que ahora se está generando una nueva ilusión. Estamos en el principio de sacar a ese enfermo en fase terminal de la UVI y recuperarlo. Son síntomas que voy percibiendo con las actividades que hemos desarrollado y también con otras que se han hecho como la Fundación Toro de Lidia. Hay síntomas de mejoría, podría decirse. La gente tiene que ilusionarse, hay que crear la ilusión. Los mimbres los haremos entre todos, pero si la gente no acude a la plaza…
¿Por qué eligió esta plaza? ¿Qué vínculo tiene con esta tierra?
Lo hice porque sé que es muy difícil. Es un reto personal el que tengo, con una plaza de primera. Me creo en la obligación moral de apostar por Córdoba. Hay un asunto personal con esta tierra, no lo desvelaré porque es muy fuerte, pero sólo puedo decir que quiero devolver a esta tierra lo que se merece.
  • Impresión de la afición

Hábleme de esas primeras impresiones. ¿Qué le dicen los aficionados?

Tengo toda la ilusión del mundo de que respondan. La impresión es buena y positiva. Estoy viendo que la gente va a ver un antes un después a partir de esta feria.
¿Su oferta taurina provocará movimientos de aficionados de otras provincias a esta?
A la plaza de Córdoba tienen que venir los cordobeses. Por su puesto que nos gustaría que vinieran de otros lugares, pero la prioridad es movilizar a esta afición. No es cierto eso que dicen de que si la plaza está muy tapada por San Isidro y tal… Tengo estudios que demuestran que de venir, no vendrían nunca más de mil personas de otros lugares, y tiene una capacidad de casi quince mil. Esta plaza se tiene que llenar de cordobeses. Córdoba es una gran capital andaluza, es una ciudad y una tierra con un caché, una tradición, una cultura… Y en el toreo, Córdoba lo ha sido todo.
¿Se ha fijado un reto numérico de abonados como base de sujeción del ciclo?
Queremos duplicar el número de abonados. Actualmente, hay cuatrocientos abonos más los abonos jóvenes. La idea es llegar a ochocientos más los jóvenes. También le digo, déjeme soñar. Prefiero no fijarme en las cifras.
«Ojalá, pueda volver a contratar a José Tomás, pero eso es otra historia»
Contrató a José Tomás en Granada y llenó…¿Aquí se obrará el milagro?
A ver, milagros solo los he hecho en Mérida y en Cáceres. Allí me encontré a una afición venida a menos y las plazas vacías. Conseguí llenarlas. También en Algeciras y en Granada, pero milagro como tal, en tierras extremeñas. Lo de José Tomás es otra historia.
Tal y como lo dice, no parece una opción para Córdoba.
Mi experiencia con José Tomás ha sido única, diferente en todos los sentidos. Sólo tengo palabras de agradecimiento para él y para su entorno. Porque él me ha dado mucho. Contratarle ha sido un sueño cumplido, ojalá pueda volver a hacerlo. Es único.
¿Tanto ha cambiado el toreo como para que eso ocurra?
En el contexto del toreo actual lo que se hace es lo que demanda el público. Las pruebas, con gaseosa. Se le están abriendo las puertas a gente que ha llegado nueva. Antes no estaban en las ferias Ureña, De Justo, el propio Roca Rey… Asumamos que los carteles que llevan gente a la plaza son aquellos donde están las figuras. Como empresario estoy dispuesto a asumir pérdidas, pero perder no es un buen síntoma en la vida. A mí, realmente, me mueve un tema vocacional con el toreo.