La Directora de los Museos Municipales cordobeses, Mercedes Valverde, puede hoy asegurar que el cuadro, hasta ahora en poder de los descendientes del Califa, es obra de Julio Romero de Torres.

La Sra. Valverde afirma que el retrato fue realizado por el artista en el año 1900, inspirándose en el ya fallecido Rafael Molina Sánchez “Lagartijo”. El cuadro, que llevaba un siglo sin ser reconocido como original, completa ahora el conjunto de pintura taurina de Romero de Torres, quien retrató también a los míticos Guerrita, Machaquito o Belmonte.

El legado artístico de Romero de Torres se conserva en el Museo Julio Romero de Torres de Córdoba , donde junto a sus lienzos de temática taurina destacan las obras «Amor místico y amor profano», «El Poema de Córdoba», «Marta y María», «La saeta», «Cante hondo», «La consagración de la copla», «Carmen», «La chiquita piconera» o «El retablo del amor».