Nuestra Fiesta Nacional

hoy de manera especial

en «Los Cabales se anima,

al ver en la presidencia

a ésta gran eminencia

de la cirugía taurina.

DON ENRIQUE SIERRA GIL

ha llegado hasta Madrid

desde la ciudad hermana

grandiosa y monumental

con prestigio universal

que Barcelona se llama.

Aunque nació en Cataluña

allá en la Ciudad Condal,

éste famoso galeno

es castellano manchego

con sangre de Ciudad Real.

DON ENRIQUE SIERRA GIL,

a quien tenemos aquí

por su recto proceder,

es doctor con gran cartel

en nuestro mundo del toro,

porque actúa de manera

que es de los que pocos quedan

que llevan alma de seda

en su corazón de oro.

Dentro y fuera de los cosos,

un médico muy famoso

con clase y categoría,

de trato maravilloso

cuando está en la enfermería.

Con un afecto profundo,

le admiramos todo el mundo

en los ambientes taurinos,

ya que a éste ilustre doctor

la mas selecta afición

nunca tuvo en el olvido.

ENRIQUE SIERRA, se llama,

quien de tierras catalanas

a «Los Cabales» llegó

compartiendo ésta jornada

tan taurina y animada

que se celebra en su honor.

Hoy en ésta reunión,

palabras de admiración

darán forma a mi poema

con una gran complacencia

que dedico a un cirujano

a quien todos admiramos

por su gran inteligencia.

¿Qué sería de los toreros

si no hubiera caballeros

como éste que aquí tenemos

en la Peña «Los Cabales»?

Cómo son profesionales

tienen atenciones tales

al tratar a su pacientes,

que su abnegada labor

la valora ésta afición,

que a su lado está presente.

DON ENRIQUE SIERRA GIL,

ésta afición de Madrid

muy de verdad os va a rendir

un homenaje sincero,

porque salvasteis la vida

a muchísimos toreros.

Las maravillosas manos

de éste ilustre cirujano

son privilegio divino,

que quiso conceder DIOS,

a éste eminente doctor

tan cabal, y tan taurino.

Bajo el cielo catalán,

la Plaza Monumental

que aun conserva esa ciudad

que se llama Barcelona,

sobre la categoría

que tiene la enfermería

que dirige su persona.

Nunca éste ilustre doctor,

hizo alguna distinción

cuando atendió a un matador

con mucha fama y prestigio,

o a un modesto novillero

principiante y sin dinero

que sueña con ser torero

y anda aprendiendo el oficio.

Al venir de Barcelona,

nuestra afición se emociona

viéndole en la presidencia,

pues merece gran honor

y a la vez admiración

de toda la concurrencia.

Hoy de Cataluña vino

éste médico taurino

por merecer tal honor,

ya que en Madrid tiene amigos

que siempre han reconocido

la entrega a su profesión.

Admira a José Tomás,

lo mismo que a Manzanares,

y al que sabe:»torear’

con gran naturalidad,

con pureza y con verdad

que se viste de alamares.

DON ENRIQUE SIERRA GIL,

el gran doctor que está aquí,

tiene una moza de espadas

que ALICIA AGUILAR se llama

partidaria de Morante,

que no es otra que su esposa

gran dama maravillosa,

distinguida y elegante.

Este famoso doctor

se siente muy español

aunque viva en Barcelona

de una forma muy evidente,

puesto que es el presidente

de amigos tan excelentes

que lucen capa española.

Vamos todos a brindar

por tan ilustre doctor

que entre nosotros tenemos

  en esta peña «cabal»,

e interpretando el pensar

por mi sincera amistad

con todos mis compañeros,

larga vida le deseo

a éste eminente doctor,

y que con él nos veamos

por el bien de ésta afición

donde reina la armonía

siempre con sana alegría

al decir con emoción:

! VIVA DON ENRIQUE SIERRA!

un castellano manchego,

catalán, y muy español,

que por la gracia de DIOS,

es ejemplo de hidalguía,

señorío y distinción.

 

Autor: Tomás García – Aranda Gutiérrez. Comentarista Taurino