En tarde climatológica, poco propicia para estar sentado en el tendido. El aforo presentó menos de un cuarto de entrada en este primer festejo del cartel de la Comunidad de Madrid, cuando se espera mejor tiempo con el comienzo de mayo.

Los novillos de la divisa toledana de El Montecillo en casta Juan Pedro Domecq Díez. Tuvieron muchas hechuras, el primero y el quinto. El segundo encastado, tercero, cuarto y sexto manejables y deslucidos. El primero con buenas hechuras y noble se las vio con el zaragozano Imanol Sánchez, muleteo que no llegó a alcanzar un tono torero de calidad y acabó de pinchazo aviso y estocada trasera. El cuarto se dejó torear y lo muleteó sin concretar nada definitivo y lo arreó un bajonazo que dobló tras sonar un aviso.

Emilio Huertas se mostró decidido con el encastado que salió en segundo lugar, Con embestida en profundidad, humillado y con nobleza. Toreó con buenas maneras hasta rematarlo de una estocada ladeada. Dio vuelta al ruedo. El quinto fue bien a las telas toreras, repitiendo en la embestida. Naturales y derechazos que seguía el novillo con más clase que la que ponía el diestro. Mató de seis pinchazos una casi entera, aviso y dos descabellos.

Juan Millán tuvo en suerte el peor lote, el tercero soso pero manejable. El novillo ofrecía poco y lo despachó de una estocada sonando un aviso. Al sexto lo porció, pero el novillo no iba y se lo quitó de delante de dos pinchazos, una casi entera, aviso y dos descabellos.

A pesar de los novillos con arrancada y de la buena voluntad de los toreros, la tarde pasó sin relumbrón. Los novilleros tienen que rectificar y hacer un toreo más lidiador, para alcanzar mejor cotización pues no sólo consiste en la buena voluntad.

 

Madrid, 2 de mayo de 2013. Monumental de Las Ventas

Corrida del Día de la Comunidad de Madrid

Orejas para los tres espadas

 

 

Tarde nublada y entrada que no alcanzó más que un cuarto del aforo. En el palco de la Comunidad de Madrid, el Presidente Ignacio González y en el palco real la Infanta Doña Elena. Como ya no existe protocolo alguno, los diestros no se dignaron en brindar a distinguidas personas, y hasta en estos detalles de omisiones anda la fiesta de los toros. Que no son las mismas.

La terna Antonio Ferrera, Morenito de Aranda y Alberto Aguilar, lidiaron tres toros de los Hermanos Lozano (1º, 4º y 6º) y toros de El Cortijillo (2º, 3º y 5º).

Antonio Ferrera se las vio con el primero que se iba suelto de los capotes y se empleó en varas. Lo banderilleó con buen estilo al cuarteo y al quiebro. Ante la muleta que pretendía engancharla echando la cara arriba y cortando la embestida. Lo dominó y se lo quitó de delante de una estocada.

El cuarto se iba suelto en varas, y lo cambiaron de sitio para concretar la suerte. Continuó con la intención de irse de las telas toreras, por lo que se dobló con el astado con buen son torero hasta dominarlo y lo remató de una estocada trasera.

Morenito de Aranda, al segundo que iba bien lo recogió con el capote con buenos lances. La buena arrancada y la embestida noble del burel, logró una buena faena y al dejar una estocada que mató sin puntilla resultando cogido en el embroque fue premiado con oreja. El quinto salió con tendencia a la huida, lo banderilleó con acierto y tras unos doblones, siguió con muletazos de buena factura. Sonó un aviso y acabó de estocada y descabello.

El madrileño Alberto Aguilar se lució con capote en el tercero y con la muleta realizó una labor muy torera obligándole al toro con doblones eficaces y muy toreros y cuando ya se había hecho con él, lo despachó de pinchazo y descabello.

En el concepto de lo que había sido la tarde quedó el toreo de Ferrera y el muleteo de Alberto Aguilar.

 

José Julio García
Decano de la Crítica Taurina
Periodista – Escritor
Escalera del Éxito 103