El matador español David Gil en su primer toro cortó una oreja y armó un lío con su segundo astado de la tarde de Checayani, al que le cortó dos orejas, siendo fuertemente ovacionado.
El francés Julien Dusseing «El Santo» tuvo el trago amargo de la tarde al pasaportar a su astado de Checayani en forma abreviada y sin pegar un muletazo.
El novillero peruano Jimmy Guia «El Greco» mató de Rural Alianza un novillo bien armado astifino del pitón izquierdo pero con peligro, tras escuchar un aviso, da vuelta al ruedo del mismo.
El novillero venezolano Antonio José Ramos dio vuelta al ruedo, tras una muy buena faena desde que comenzó ejecutando una larga cambiada, unas verónicas y unas navarras de calidad, luego invitó a banderillear al torero francés dónde entusiasmó al público ejecutando el par del violín, realizó una faena por las dos manos pero el novillo falto de fuerza se vino abajo, entra a matar y después de tres cuartos de espadas y dos descabellos termina con el animal, fue ovacionado y da vuelta al ruedo del mismo.
Verdaderamente fue una tarde de mucha inquietud, una tarde muy buena, buenos toros, buenos toreros, buen ambiente, buen público, mucha, pero mucha afición se pudo observar y sentir en el tendido.
Crónica de Jessica Figuera
Fotos de Antonio José Ramos