En Texcoco… la voluntad de los toreros por encima de la mansedumbre (Video)

 

 

 

 

 

El primero manso que recibió un leve puyazo, acudiendo con la cara alta desde con la capa, se vencía del lado izquierdo; el segundo, manso, un leve rasguño en varas, deslucido; manso, sin transmisión se fue al caballo de la querencia natural y recibió un leve refilonazo y otro apenas en el caballo de la contraquerencia, también fue deslucido; el cuarto, manso aventando cornadas para deshacer el encuentro y quitarse la vara, con peligro por ambos pitones; manso, poniéndose por delante ; manso, deslucido con la cara alta pronto regateó las embestidas. Ignacio Garibay: Silencio y saludó en el tercio. Miguel Ángel Perera: Oreja y división tras dos avisos. Octavio García El Payo: Silencio tras aviso y oreja protestada.

Detalles:

Fueron entregados por el empresario del coso texcocano, don Marco Castilla, los trofeos a los triunfadores del serial 2010, así que pasaron lista de presente, como: Mejor banderillero: Christian Sánchez; Mejor Picador: César Morales; Mejor Encierro: Don Fernando de la Mora; Mejor Faena: Ignacio Garibay; Triunfador del serial: Ignacio Garibay. Mención de honor a la Peña Los de Armilla, Garza y Silverio, que preside nuestro dilecto amigo Don Gabino Lombana.

 


 

 

 

Todos llegamos con la ilusión de ver una gran corrida de toros, después de las intensas faenas que había escrito en el coso texcocano, Arturo Saldívar, el día anterior, la emoción estaba en su apogeo, pero… ¡nada!, que sale un encierro de don Fernando de la Mora, al que laurearon antes de iniciar la corrida como el máximo triunfador del año anterior, y cuando esperábamos que consolidaría este hecho en la actual  Feria de Texcoco, no fue así. Otra vez más toros que apenas y pasaron lista a regañadientes en las cabalgaduras… otra vez toros que regatearon embestidas, y otra vez los toreros a luchar contra este mal endémico de la mansedumbre para sacar una tarde, que por otra parte no pasará a la historia. Bien… bien ha estado en su primero, Miguel Ángel Perera, pero ver a este magnífico torero, con este tipo de astados, no hay lógica… no existe congruencia, ya que no puede expresar todo su potencial artístico, sí, estuvo… bien… luchón… machacón, pero el toreo es grandeza, es una descripción grandilocuente de lo que es la sucesión de efímeros momentos escultóricos, que conducen a la sublime locura, por eso la oreja que le han concedido supo tan poco, pero ahí quedó para sus estadísticas; más luchón y más machacón estuvo con su segundo, en donde la fatalidad lo llevó a estar sumamente agobiado con el acero, tan fue así que escuchó hasta dos avisos.


En fin… De pronto, cuando caía el último de este festejo, apareció una oreja que decidió concederle el señor juez al… señor Payo, oreja que acabó siendo estentóreamente protestada, no porque haya estado mal el queretano, sino porque cierto sector de público pleno de júbilo, tras las bebidas espirituosas, así como algunos seguidores del torero, entre ellos, por supuesto, el señor juez de plaza, le quisieron motivar con ese premio, pero a la demás asistencia no le pareció y lo hizo notar con fuerza inaudita.


Si… motivarlo está bien, pero no regalarle orejas, porque se confunden. Fue una pena como se estrellaron las ilusiones de alcanzar el triunfo esta tarde, ante esa frontera casi infranqueable de la asfixiante mansedumbre. Sí, de una mansedumbre que desgasta a todos, y más a los toreros, y a pesar de que el señor Payo estuvo voluntarioso en ambos ejemplares, este… el sexto, apenas y el bovino le permitió extraer un par de series, que fueron interesantes, pero… ¿qué se puede hacer en este contexto?… pues seguir luchando, porque el señor Payo tiene todo el porvenir en sus manos.

Ignacio Garibay con un pié en el avión para volar a España y comparecer en la primera plaza del mundo taurino… la Monumental Plaza de Las Ventas de Madrid, estuvo a la misma altura, plena de dignidad y entrega sin cortapisas que sus compañeros, pero cuando las cosas no salen, pues no se puede y lo demás resulta imposible.

Esperamos que esta tarde, cuando saldrán por toriles los legendario toros tlaxcaltecas de Piedras Negras, la emoción vuelva a colmar a los tendidos, porque a las cosos taurinos uno se va a emocionar, no a divertirse, para eso… para divertirse está el circo.

 

Foto: Julián Herrera